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A la derecha del Mirador del Cisne, camuflados entre la maleza, asoman seis pilotes de cemento, de un metro de alto. Las columnas no son testigos silenciosos del llenado del lago, sino que fueron colocadas para delimitar el territorio de un predio vecino.

Los postes fueron puestos el año pasado en zona que hace parte del cuerpo de agua, pero con la intensa sequía producto del fenómeno de El Niño, el terreno estaba yermo.

La veedora ambiental, Luz de Sarmiento, afirma que en ese momento, los propietarios aprovecharon para colocar las cercas y con eso aumentar el tamaño del predio.

'Esa zona pertenece al lago. Cuando uno conoce la historia de la zona se da cuenta que este espacio es parte del cuerpo de agua, solo que ahora mismo no tiene líquido por el problema de El Cisne', apunta la activista.

Lo cierto es que aunque se está haciendo la obra de recuperación del recurso hídrico con un llenado de 10.000 metros cúbicos de agua tratada, como indica la contratista Ambbio Colombia, el líquido se ha decantado hacia la zona izquierda por la inclinación de la pendiente, lo que tiene el sector de la derecha seco y lleno de maleza.

La veedora indica que 'esa parte parece que estuviera calculada desde un principio para convertirse en lote, porque desde hace mucho tiempo ha debido hacerse una intervención'

De Sarmiento señala que 'en ese pedazo debe hacerse un dragado para retirar los sedimentos y ampliar la profundidad del lago, cosa que hasta el momento no se ha hecho'. En su opinión eso evitaría que 'sigan aprovechando la sequía para mover las cercas y preparar los lotes'.

Afirma la ambientalista que la situación es similar a la de Adrianus Cornelis Maria Hollenberg, un ciudadano holandés que construyó un canal para desviar agua de El Cisne para llevarla hasta la parte trasera de un hotel boutique, para llenar un lago artificial, sin tener los permisos ambientales correspondiente.

Por esa irregularidad, Hollemberg fue sancionado con el pago de $420 millones, la reforestación de la zona con 15.000 mangles y la destrucción de las obras que adelantó.

Sobre la ubicación de los pilotes, el director de la Corporación Autónoma Regional del Atlántico (CRA) manifiesta que 'están en el lote de un particular', pero agrega que la entidad emitió una orden de 'restricción a los cerramientos de los predios aledaños al lago de El Cisne'.

Alberto Escolar explica que se tomó esa medida por la temporada de sequía, el trabajo de recuperación del cuerpo de agua y el realinderamiento de la ronda hídrica.

'Con fundamento en esa prohibición vamos a proceder a la demolición de esa cerca y de otras que no hayan cumplido con la norma — expresa el funcionario — con georradares vamos a mirar que no estén entrando a la zona del lago'.

Con respecto a la distribución de los lotes y los límites de los predios, Escolar expresa que la Universidad del Magdalena está adelantando el estudio de la ronda hídrica y que el mismo debe ser entregado a mediados de marzo.

'Con esa información el Instituto Agustín Codazzi (Igac) hace el proceso de deslinde para que luego el Instituto Colombiano de Desarrollo Rural se encargue del realinderamiento. Así comprobaremos que no se ha perdido terreno del lago de El Cisne', puntualiza el director de la CRA.