El caudaloso las construye y las desarma. Las presta y las arrebata. Se dividen y se unen. Así, a su antojo y querer, aparecen, crecen y mueren los terrenos rodeados de río que se forman a lo largo y ancho de los 1.500 kilómetros del río Magdalena.
Sí, Atlántico y Magdalena tienen islas en su río, pero que no son hijas de nadie. El gran debate es sobre sus dueños, así como el presente y futuro de sus habitantes.
Sobre cuántas hay no se tiene estadística oficial. La dinámica de la arteria fluvial y su constante transformación dificulta la tarea de mediciones en materia de ubicación y dimensiones. Según datos de Cormagdalena, entre Barranquilla y Suan hay 13 islas.
EL HERALDO hizo un recorrido por cinco de ellas, que aunque lejos de ser paradisíacas, representan un ‘tesoro’ para quienes se apropian de sus beneficios.