No fue necesario que la tierra temblara para que el Cuerpo de Bomberos, la Policía Metropolitana de Barranquilla, la Armada Nacional, la Defensa Civil y otros organismos de socorro desplegaran un mecanismo de reacción en nueve escenarios de riesgo simulados ayer en Barranquilla.
Aunque el subsecretario de la Oficina de Atención y Prevención de Desastres del Atlántico, Edinson Palma, había advertido sobre el ejercicio que se cumpliría dentro del Simulacro Nacional de Respuesta a Emergencias, parte de la ciudadanía no estaba al tanto de lo que estaba sucediendo.
Por consiguiente, varios transeúntes y vecinos se mostraron asombrados, tanto que unos se desmayaron, como sucedió en el Centro Cívico y en el colegio Santa Magdalena Sofía (ver notas anexas)
Pese a las situaciones de pánico, Palma calificó como positiva la actividad y expresó que 'es un proceso de aprendizaje para mejorar la capacidad de respuesta'.
Detalló que aunque 14 municipios del Atlántico se inscribieron, el simulacro solo se ejecutó en Soledad, Sabanalarga, Puerto Colombia y Juan de Acosta. 'Es una lástima que los demás no hayan participado'. Se refería a Galapa, Baranoa, Piojó, Repelón, Manatí, Ponedera, Campo de la Cruz, Suan, Sabanagrande y Santo Tomás.
BALANCES
De acuerdo con la Oficina de Prevención del Atlántico, en los simulacros departamentales evacuaron a 3.976 personas; en Barranquilla a 3.306.
En el país el reporte entregado por la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres registró 1.100.000 colombianos evacuados. Los informes entregados por los Consejos Departamentales de Gestión del Riesgo reportaron la participación de 700.000 personas en 31 departamentos, 400.000 evacuadas en Bogotá y la participación de más de 1.102 empresas privadas y 695 organizaciones comunitarias.
Un ‘trágico’ accidente en la Vía 40
Lágrimas, caras aterrorizadas, manos sobre las nucas y hasta ‘paparazzi’ improvisados fueron las reacciones de los ciudadanos que al transitar por la Vía 40 con calle 77B observaban el escenario de un trágico accidente de tránsito entre un tractocamión y un vehículo particular, que dejó a tres hombres heridos.
Momento en que simulan la destrucción de un vehículo para rescatar a Cristian Barreto y Andrés Rocha.
Para muchos la escena se trataba de un hecho real, como le ocurrió a Orlando Arriágada, quien confesó que se le 'pasó lo peor por la cabeza; enseguida pensé en mis familiares'.
El simulacro, liderado por Apell Barranquilla, estuvo a cargo del ingeniero de la Oficina de Atención y Prevención de Desastres del Distrito, Marlon Pérez.
El ejercicio consistía en un sismo ocurrido a las 10:00 de la mañana que ocasionó que el conductor de un tractocamión perdiera el control y se estrellara con un automóvil.
El carril norte-sur fue cerrado al paso vehicular y la zona fue acordonada. En el lugar se derramó una sustancia ‘peligrosa’ por lo que se requería de personal especializado para neutralizar el efecto.
Cerca de 15 minutos después de ocurridos los hechos estaban en el sitio 20 bomberos con dos máquinas de rescate, 40 miembros de la Defensa Civil, 11 integrantes de la fuerza de tarea de Apell, 8 miembros de la Aviación Naval de la Armada y unos 120 policías y vigías de movilidad para atender la emergencia.
El rescate de los accidentados –detalló el ingeniero Pérez– se hizo por vía terrestre, fluvial (por el río Magdalena) y aérea.
El movimiento agitado de los socorristas puso en alerta a los transeúntes y provocó reacciones. Ómar Ferrer, uno de los ‘accidentados’, comentó que vio a una mujer que 'pasó en un carro y se puso a llorar por nosotros'.
El tránsito habitualmente agitado de la Vía 40 se agudizó cuando los ciudadanos hacían una pausa para ver la sangre artificial que corría en la escena del siniestro. Andrés Rocha, miembro de la empresa Quintal (que participó y dispuso personal para el simulacro) fue otro de los ‘accidentados’ y el primero en ser rescatado; Cristian Barreto fue el segundo y lo trasportaron en una ambulancia. En la última parte del operativo utilizaron un helicóptero de la Armada que se mantuvo en el aire todo el tiempo y en el que Ferrer fue socorrido y llevado a la Base Naval.
Guillermo Fierro, quien piloteó la aeronave, detalló que este tipo de maniobras la realizan cuando 'no hay lugar despejado para aterrizar y se necesita una atención inmediata'.
Por eso, del helicóptero descendieron, a través de sogas, dos rescatistas con una camilla, mientras que otro operaba la larga cabuya y tres más permanecieron dentro de la aeronave.
Al final del ejercicio, del que muchos testigos se marcharon creyendo que era verdad, el ingeniero Marlon Pérez consideró que 'la actividad arrojó un balance positivo, pero en un hecho real la reacción debe ser más inmediata'.
Evacuación de edificios públicos por ‘sismo’
Dos estudiantes del Colegio Distrital Santa Magdalena Sofía y una persona más en el Centro Cívico perdieron el control y se dejaron llevar por los nervios mientras intentaban evacuar estas dos edificaciones, como respuesta a los simulacros programados en Barranquilla durante la mañana de ayer. El colapso de varios muros y personas atrapadas fue el desastre simulado en la institución educativa que angustió a dos de los alumnos hasta desmayarse. De acuerdo con el informe de la Oficina de Atención y Prevención de Desastres del Distrito, este fue el rescate más demorado de todos los ejercicios. 'A veces a las personas les da nervios ante estas simulaciones y se descompensan, pero las tres fueron atendidas y estabilizadas enseguida', afirmó Ana Saltarín, jefe de esta dependencia.
En el edificio de la Gobernación del Atlántico la evacuación sí se llevó a cabo en completa normalidad, sin incidente alguno. A las 10:00 de la mañana, como estaba previsto, empezó el incendio recreado en la edificación con explosiones en exteriores e interiores, humo en el segundo y quinto piso, y ruptura de algunas tuberías. Todo el personal se desplazó en filas, conservando la calma y atendiendo las indicaciones que los rescatistas entregaban con un megáfono, como desplazarse por las escaleras y siempre del lado derecho.
En el piso 12 de la Gobernación simularon la presencia de un herido atrapado entre escombros, que fue rescatado con cuerdas por la parte exterior del edificio, en un cuidadoso trabajo de altura en colaboración con el Cuerpo de Bomberos.
'El tiempo de rescate de una persona depende de sus condiciones físicas y médicas, además de la estructura donde se encuentra y del clima. En estos casos, hay que estabilizar al paciente, porque tampoco buscamos prontitud y que llegue sin signos vitales. Es mejor demorarse un poco más y que llegue con vida', explicó Juan Carlos Guevara Rodríguez, asesor de seguridad industrial de la Gobernación.
De acuerdo con Guevara, el tiempo de respuesta fue de 10 minutos y 3 segundos, justo lo que tardaron en evacuar unas 700 personas que se hallaban en el lugar.
'Estamos entrenando, esperamos que en próximas ocasiones podamos reducir el tiempo a 4 o 5 minutos, que es lo que dictan los estándares para evacuar un edificio de 12 pisos', indicó Guevara, una vez culminó el ejercicio y fueron retomadas las labores, hacia las 10:40 de la mañana.
En términos generales, la participación de funcionarios y visitantes fue positiva y la mayoría se mostró de acuerdo con este tipo de actividades que promueven la cultura de prevención.
'Para mí ha sido un éxito. A medida que la ciudad va creciendo, sobre todo al ritmo que lo está haciendo Barranquilla, debemos estar más blindados. Debemos exigirle al Gobierno Nacional ejercicios como estos cada dos o tres meses para recibir más lecciones', expresó Alexander Bernal, participante del simulacro.
