El Índice de Progreso Social (IPS), que analiza y estudia la calidad de vida en los países y ciudades, se redujo en Barranquilla en un 1,14% en 2015, según el informe presentado ayer por la Red de Ciudades Cómo Vamos. La Arenosa desmejoró en materia de bienestar para la sociedad y se encuentra en el umbral del nivel medio-bajo, en el séptimo lugar en del ranking de ciudades.
Para medir el IPS se tienen en cuenta las herramientas con las que cuentan las diez ciudades principales de Colombia, donde se concentra el 40% de la población, para contribuir a su desarrollo social. Es decir, el grado de necesidades básicas, fundamentos del bienestar y oportunidades ofrecidas a la sociedad.
'Por ejemplo, no nos interesa mucho saber cuánto se invirtió en la educación, pero sí qué tanto aumentó la tasa de escolaridad. Eso nos permite aproximarnos a lo que consideramos crecimiento', explicó Juan Cristóbal Birbuet, director del IPS para América del Sur.
Durante el evento, Birbuet expresó que si bien este índice no está diseñado para mejorar las políticas públicas existentes, 'lo que sí puede hacer es visibilizar las problemáticas que para la comunidad son importantes'.
Retroceso
En el informe, Barranquilla tiene un puntaje de 59,4 sobre 100 posible, mientras que el IPS de Colombia fue de 64,5 en 2015 con respecto al año anterior, lo que se traduce en una reducción del 1,2% en el promedio nacional. Entre mayor sea el puntaje, más progreso social supone.
De acuerdo con Barranquilla Cómo Vamos, la ciudad tiene bajos desempeños en las dimensiones de Necesidades Humanas Básicas, como la atención médica, y Fundamentos del Bienestar, como la sostenibilidad ambiental, donde se ubica en el noveno lugar de ambos campos con puntajes de 62,1 (nivel medio -bajo) y 59,8 (medio – bajo) respectivamente.
Con respecto a necesidades básicas, la ciudad presenta desventajas relativas en componentes como Nutrición y Cuidados Básicos, así como Vivienda y Servicios Públicos, en donde ocupa el décimo y noveno lugar en el ranking, con puntajes de 60,3 (medio bajo) y 40,5 (muy bajo), respectivamente.
La sostenibilidad ambiental también es uno de los componentes donde Barranquilla no pasó la prueba, pues se sitúa novena de diez con un puntaje de 49,4 , en el nivel bajo.
'El IPS Barranquilla evidencia la necesidad de mejorar el transporte público, promover el transporte no motorizado, mejorar el desempeño de los indicadores de salud, de la calidad del servicio eléctrico y de la vivienda; así como la calidad en la educación media, entre otros temas', precisó Rocío Mendoza, directora de Barranquilla Cómo Vamos.
Sin embargo, la capital del Atlántico consiguió un buen desempeño en la dimensión de Oportunidades, en la que se ubica de quinta.
Ante esto, el economista barranquillero Jairo Parada consideró que 'aunque con este indicador seamos una tierra de oportunidades, en realidad sabemos que el desempleo disminuye en la ciudad con una informalidad que aumenta'.
En materia oportunidades, Barranquilla tuvo buenos resultados en el campo de Derechos personales al ser segunda de las diez ciudades, con un puntaje de 84,5 (muy alto). En contraste con lo anterior, las cifras reflejaron la poca tolerancia e inclusión existente en la ciudad, así como las escasas oportunidades en el acceso a la educación superior, dimensiones con puntajes de 39,8 (muy bajo) y 41,7 (muy bajo) respectivamente.
¿Cómo se mide el IPS?
El Índice de Progreso Social mide 48 indicadores reagrupados en 12 componentes y 3 dimensiones para finalmente generar un puntaje de 0 a 100, en donde a niveles más altos, más progreso social.
Para esto, se tienen en cuenta aspectos relevantes para la sociedad como la tasa de homicidios o las muertes por accidentes de tránsito, que revelan niveles de seguridad, o como la esperanza de vida y la tasa de suicidios, incluidas en los componentes de salud y bienestar. También se toman problemáticas específicas como la tolerancia por los desplazados o la inclusión de los desmovilizados, o como el embarazo adolescente y el trabajo infantil, que reflejan el grado de libertad personal.