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Después del fuerte aguacero que cayó en Barranquilla el mediodía del sábado y que generó emergencias en la calle 84 con carrera 50, la Administración Distrital indagó ayer las causas de lo sucedido. El mismo día un árbol cayó sin dejar heridos en la calle 84 con carrera 49C.

El secretario de Infraestructura, Rafael Lafont, realizó un recorrido por la zona afectada y habló con habitantes para indagar la razón de la inundación. Según el funcionario el fuerte aguacero hizo que el arroyo de la 85 se desbordara. Indicó que este baja por la carrera 50, tiene un desvío por la calle 84B y pasa a la carrera 51. Allí –precisó – pasa por un túnel que va por debajo de la 51B y llega hasta la calle 84, sale por Petromil (en la carrera 52), para que las aguas lleguen a la zona de canalización.

Dijo además, que la cantidad de basura arrojada en la vía taponó las rejillas ubicadas entre las carreras 51 y 51B, lo que ayudó a agravar la situación, porque el agua no tenía por dónde evacuar.

Según Lafont, las olas que formaron los vehículos a su paso hicieron que el agua elevara aún más su nivel y entrara a los locales comerciales de la zona.

'La canalización trabajó perfectamente a pesar de que la basura se sigue arrojando a las rejillas. Solo se cubrieron las tres primeras rejillas de la cuadra donde empieza la canalización y en las siguientes ya el arroyo desaparece', aseguró Lafont.

Aseguró que ya se debe comenzar a pensar en una futura ampliación de la canalización de la calle 84, por lo menos dos cuadras más, es decir, entre las carreras 49C y la 51. 'Tendría que extenderse la canalización en una segunda fase. Esto es algo que se debe estudiar', afirmó el secretario de Infraestructura, Rafael Lafont.

No arrojar basuras

Insistió en que la ciudadanía tiene que concientizarse del daño que ocasiona cada vez que arroja basuras a los arroyos. 'La gente sigue tirando bolsas plásticas llenas de basura, lo mismo que escombros. Esto queda atrancado en las rejillas. La gente no ha querido entender que hay una empresa que opera muy bien el servicio de aseo, por lo que no hay necesidad de aprovechar la lluvia para sacar la basura', enfatizó Lafont.