Aquellas tiendas que por tradición han vendido sus ‘frías’ a vecinos y que propician un ambiente sano para que las personas compartan una cerveza no serían reguladas.
Así lo dio a conocer el general Fabián Laurence Cárdenas, jefe de Planeación de la Policía Nacional, quien visitó ayer EL HERALDO en compañía del general Mariano Botero Coy, comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla.
Según el general Cárdenas, el Código de Policía 'en ningún momento va en contra de la cultura, por eso el alcalde tiene funciones de Policía y entraría a regular esos aspectos', explicó.
El general detalló que 'una pequeña cantidad de tiendas son las que presentan problemas de riñas. Sobre esas tiendas críticas hay que empezar a regular, sobre las otras no', aseguró el alto oficial de la Policía.
Este trabajo se realizaría, según explicó el jefe de Planeación de la Policía, soportado en un estudio de comportamiento que da el Centro de Información Estratégica Policía Seccional (Cieps). 'Hay una claridad, un acervo probatorio que nos va a decir aquellos puntos calientes: ‘hágase un énfasis y empiece a regular’. Sobre los otros no hay que regular', aseguró.
Sobre los puntos que no se regulen, manifestó Cárdenas, las personas podrán estar tranquilas. 'Es un tema de cultura y de compartir', afirmó.
Sin embargo, añadió Cárdenas, que si hay estadísticas que soporten que algún lugar 'se convierte en un punto caliente porque ha generado riñas, ha facilitado el consumo de sustancias alucinógenas, el tráfico de estupefacientes y otros factores como prostitución infantil, por ejemplo, sobre esos hay que hacer énfasis'.
Ante esto, el general Mariano Botero explicó que la función como Policía 'es hacer cumplir la ley'. 'Las autoridades van a ejercer un papel preponderante en materia de regulación de aquellos sitios', advirtió. Resaltó que la labor de la Policía 'va a ser en prevención, y por eso en materia de desarrollo del Código el gran soporte que estamos haciendo, en esta primera fase, va a ser pedagógico, que la gente conozca el Código', indicó.
El comandante de la Mebar explicó que a través de caravanas realizadas a nivel metropolitano se hicieron controles. 'Se estaba viendo la viabilidad de las tiendas. Hay algunas que no tienen permisos, esas se están cerrando, ya que al no ser certificadas están rayando en la ilegalidad', explicó.
Además, cuestionó que hay algunas tiendas que 'venden bebidas embriagantes adulteradas'.
Ante la posibilidad de realizar un censo entre las tiendas que no se verían afectadas, el comandante recalcó que 'inicialmente se están ubicando las que realmente están autorizadas. Se han cerrado varias que no tenían permiso y que de la noche a la mañana florecieron. Ahí hay un control', enfatizó.
El general Botero señaló que a través de los controles que ejecutaron durante las dos últimas semanas 'hay una reducción importante en hechos de lesionados'.
Igualmente, reconoció la responsabilidad dada al tendero. 'Cuando una persona se torna agresiva, debe llamar a la Policía. Gracias a esas llamadas ¿cuántas lesiones no se evitaron?, ¿cuántos muertos no se evitaron?', preguntó el general Botero Coy.
El comandante de la Mebar informó que el pasado fin de semana cerraron 'más de catorce picós y cuatro de estos tocó incautarlos'.
LGTBI: Pedagogía del Código
En el encuentro participó Wilson Castañeda, director de Caribe Afirmativo, en representación de la comunidad LGBTI, quién preguntó cómo se preparó la Policía para aplicar el Código en el caso de las llamadas minorías.
El comandante de la Mebar respondió que el proceso pedagógico dentro de la institución sobre la comunidad comenzó en agosto de 2016. Aseguró que se ha comenzado a hacer pedagogía a diferentes sectores de la comunidad, entre ellos, a la comunidad LGBTI'.
'Decreto va en coordinación con el Código'
Sobre el Decreto 0192 de 2017 firmado el pasado martes por el alcalde Alejandro Char y que adapta algunos artículos del Código durante la temporada de Carnaval, el comandante de la Mebar, general Mariano Botero Coy, explicó que 'el producto que ha sacado el Alcalde va en coordinación y de acuerdo con el Código Nacional de Policía y Convivencia'.
El general enfatizó que con la normativa 'no se está limitando, se están reforzando ciertos comportamientos que de una u otra manera se habían olvidado, y que era importante reglamentarlo', aseguró.
Botero Coy recalcó que el decreto lo que hace es 'limitar determinadas zonas donde se reglamenta, por parte del Alcalde, la actividad de Carnaval'. Es decir, si en una zona delimitada por el mandatario hay una casa que quiera hacer una fiesta 'no hay problema, pero si en la zona no está, sí actuarían'.
'Si no se desarrolla evento cercano a la vivienda que desea realizar una fiesta, deberá tramitar sus permisos bajo unos parámetros para que la Policía pueda garantizar que este no se vaya a salir de dimensión', explicó.
El comandante enfatizó que el Alcalde, una vez ha sacado el decreto, hizo referencia a lo que dice el código'. Y recalcó que la normativa 'es un elemento importante que no va en contra del Carnaval'.
