Los fuertes vientos típicos del inicio de año se han intensificado en febrero y durante este fin de semana han dejado un saldo de por lo menos nueve árboles caídos en Barranquilla, además de daños en propiedades y cables caídos, según reportó el Cuerpo de Bomberos de la ciudad, así como los usuarios de EL HERALDO a través del servicio informativo Wasapea (3104383838).
De acuerdo al Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, Ideam, las brisas podrían alcanzar en la capital del Atlántico y en gran parte de la Región Caribe los 30 nudos, es decir, 56 kilómetros por hora. El viernes, la entidad había reportado velocidades del viento de hasta 64,8 kilómetros por hora.
El fenómeno, de acuerdo a lo explicado por la meteoróloga del Ideam, Tatiana Rodríguez, se extendería hasta la madrugada de hoy, para luego comenzar a bajar su intensidad.
'Esta condición afectaría toda la región central y oriental de la cuenca del Caribe colombiano básicamente porque tenemos un ingrediente de presión entre la zona continental y la zona marítima', explicó la experta en meteorología.
Lo anterior, según el instituto, enciende la alarma roja en el Mar Caribe por los altos valores de oleaje. Durante el día de ayer, la altura de las olas osciló entre los 3.0 y 4.0 metros, siendo más elevada en sectores específicos del mar adentro.
Por esto, la recomendación de las autoridades a los pescadores y usuarios de las embarcaciones de poco calado es que consulten con las capitanías de Puerto para monitorear la evolución del fenómeno.
Por su parte, el comandante del Cuerpo de Bomberos, Jaime Pérez, recomendó a la comunidad que 'evite estacionarse cerca o debajo de árboles y líneas de conducción de energía de alto voltaje' y recordó además que durante este tiempo 'es importante' asegurar los amarres de los techos.
Dijo también que las construcciones en la ciudad son motivo de atención, por lo que hizo un llamado a las firmas que utilizan grúas aéreas para que suspendan sus operaciones, con el fin de evitar accidentes.
Para los peatones, sugirió transitar con cuidado cerca de las zonas de construcción por los elementos propios de estas que pueden resultar peligrosos con las brisas, así como tener 'especial cuidado' con los menores de edad.
