Un grupo de caseteros del sector de Miramar, en Puerto Colombia, manifestaron su inconformismo por la reubicación de sus negocios debido a las obras de ampliación del Malecón.
El grupo de operadores turístico asegura que las nuevas condiciones que tendrán sus negocios, lugar que usan también como vivienda, no tienen las mismas condiciones de los actuales predios.
Wilfrido Villalobos asegura que hace 30 años tiene una caseta en ese sector y que las autoridades le notificaron que debía desocupar el predio debido a que se encontraba en inmediaciones de la obra. Villalobos indicó que las condiciones que le ofrece la Alcaldía Municipal, no son las adecuadas para seguir con su negocio de venta de comidas y bebidas, ni mucho menos para vivir con su familia.
El casetero propone que los puestos de reubicación sean mejores estudiados ya que no se quieren ver afectados en su labor diaria.
Édgar Navarro, vecino del sector, aseguró que la socialización del proyecto por parte de la Alcaldía Municipal ha sido poca y que viven con la incertidumbre de saber si sus predios se verán o no afectado a medida que las obras avancen.
El alcalde de Puerto Colombia, Steimer Mantilla, indicó que con la ampliación del malecón del municipio buscan también dignificar y mejorar la calidad de vida de las personas que se dedican a impulsar el turismo.
El mandatario aseguró que según el informe de prosperidad social, solo se tiene pensado la reubicación de tres casetas en la zona de intervención. Además, señaló que la Dimar autorizó la reubicación temporal de los propietarios de las casetas en la parte posterior de donde están actualmente, mientras se continúa con el ordenamiento territorial de esa zona.