Un constante sonido de bocinas de carros y silbidos, muchos silbidos de los orientadores de tránsito que mueven los brazos con desespero. Con este cuadro se encontraron los conductores que intentaban transitar por el norte de la ciudad, sobre la calle 79 entre la carrera 51 hasta la 60, en la mañana de ayer.
Los cambios viales que fueron implementados en el día de ayer, en esa zona de la ciudad, fueron: la carrera 59 entre calles 77 y 59 pasó de doble sentido vial a único sentido de occidente a oriente. Por otra parte, la carrera 60/64 entre calles 81B y 58, pasó de doble sentido vial a único sentido de oriente a occidente.
Además de esto, el cierre de la calle 76, a la altura de la 52 y 53, contribuye al trauma vehicular que se vive en el norte de Barranquilla.
Fernando Isaza, secretario de Tránsito y Seguridad Vial de Barranquilla afirmó, en una entrevista en las instalaciones de esta casa editorial, que el cambio se hace para 'garantizar el flujo pensando en la seguridad vial'.
Según el jefe de esta cartera, el propósito es crear un par vial, es decir, dos vías paralelas con flujo vehicular en direcciones contrarias. 'Cuando vuelves una vía de doble sentido en único, mejoras el rendimiento del flujo, reduces la accidentalidad, giros a la izquierda dejan de ser un problema', explicó.
Isaza vino acompañado de su grupo de trabajo, compuesto por los jefes de las oficinas de gestión de tránsito y operativo, Édgar Polo y Wilson Obando, respectivamente, y los ingenieros William Llanos y Jamer Galvón.
'Siempre el primer día genera ciertas confusiones porque cambiar el hábito de las personas de un momento a otro es complicado, pero con el paso del tiempo y el conocimiento de señalizaciones, las personas comienzan a pronosticar su ruta de acuerdo a los cambios viales', complementó Polo.
Wilson Obando Moreno, jefe oficina de Control Operativo del Tránsito, estuvo en el lugar de los cambios viales y manifestó que los traumas del cambio de sentido vial se han visto concentrados 'entre las calles 78 y 82 y las carreras 51 y la 60'. Además agregó que 45 orientadores de tránsito de los 300 con los que cuenta el Distrito fueron asignados en las vías aledañas al cambio.
El ingeniero Llanos resaltó que teniendo en cuenta el trauma que se genera en un cambio como este la socialización que normalmente dura 7 días, fue instalada por 20 días.
Así también, informaron que hasta el 7 de abril el cambio estará en su etapa pedagógica y que las sanciones comenzarán a ser impuestas el 10 de abril.