Canal de Isabel II, la empresa pública responsable del ciclo integral del agua en la Comunidad de Madrid, anunció que pondrá a la venta sus participaciones y filiales en Latinoamérica, tras un proceso de 'reflexión estratégica' sobre su presencia internacional.
En este caso se trata de vender firmas como Canal Extensia, de la cual se desprende Inassa, a su vez, propietaria de la participación mayoritaria en la empresa de aseo, acueducto y alcantarillado de Barranquilla, Triple A.
Frente a la situación de Canal, Garrido explicó este jueves ante el pleno de la Asamblea de Madrid que el objetivo es realizar un proceso de desinversión 'ordenado, transparente y que asegure la obtención de la mayor rentabilidad posible para los madrileños'.
La decisión fue tomada al más alto nivel. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, dio las instrucciones para que se inicie el proceso y se lleve a cabo 'la venta de todas las empresas en Latinoamérica a través de un procedimiento ordenado'.
Los pasos que seguirá la empresa para cerrar el grifo en Latinoamérica son:
1. Canal va a contratar un asesor financiero externo, con experiencia en procesos de venta de este tipo, para que proponga diferentes alternativas para llevar a cabo las desinversiones, como venta directa u ofrecerla en mercado, entre otras opciones.
2. Este asesor deberá plantear posibles calendarios para la ejecución de la venta, determinar qué entidad realizará la valoración del negocio, cuáles serán los activos a enajenar (Canal Extensia, Inassa, activos independientes) y cualquier otro aspecto relacionado con este proceso.
3. Posteriormente, el consejo de administración de Canal analizará las propuestas presentadas por el asesor financiero.
4. Con esta información se adoptará el acuerdo correspondiente, que incluirá la oportunidad o no de iniciar el proceso de enajenación y, en caso de llevarlo adelante, el procedimiento, el calendario y el objeto de la desinversión.
Lo que estaba en curso
La decisión de desinvertir en Latinoamérica se une a la que los responsables de Canal habían adoptado, desde junio del año pasado, de cerrar de manera ordenada las firmas latinoamericanas de su propiedad y que no tuvieran actividad relacionada con la prestación del servicio de agua.
Según explicó Garrido ante la Asamblea, en la actualidad hay 12 empresas con procesos de liquidación y disolución iniciados o, incluso, finalizados. La previsión es que este proceso de cierre se haya concluido en todos los casos a lo largo de 2017.