La empresa Canal de Isabel II venderá todas sus filiales en Latinoamérica, incluyendo Inassa, firma de la cual se desprende la empresa de Aseo, Acueducto y Alcantarillado, Triple A, de Barranquilla.
Así lo confirmó este jueves EL HERALDO directamente con fuentes de la empresa pública española.
El consejero de Presidencia y Justicia, y actual presidente del Canal de Isabel II, Ángel Garrido, hizo el anuncio durante la Asamblea de Madrid. Según el directivo, el Gobierno regional, presidido por Cristina Cifuentes, 'ha decidido que el Canal se vaya del otro lado del Atlántico y venda todas las filiales que aún tiene en los países latinoamericanos'.
'El Canal solo hará a partir de ahora negocios en España', sentenció el consejero Garrido.
En el caso de Inassa, su participación en 14 sociedades de América Latina está de la siguiente manera: el 99% de la Triple A de Venezuela; el 98% de Inamex (México); el 94,12% de Recaudos y Tributos de Barranquilla (Colombia); el 82,16% de la Triple A de Barranquilla; el 75% de Emissao Engenharia e Construçoes (Brasil); y el 70% de Aguas de Samborondón Amagua (Ecuador).
Posee además el 70% de Mexaqua (México); el 66% de Fontes da Serra Saneamento de Guapimirim (Brasil); el 65% de la Triple A Dominicana (República Dominicana); el 51% de Watco Dominicana (República Dominicana); el 42% de Inforesa (República Dominicana); el 40% de Asaa de Colombia; el 35,86% de Metroagua de Santa Marta (Colombia) y el 18,76% de Sociedad Latina de Aguas (Colombia).
¿Nueva decisión?
Esta nueva decisión que habría tenido la empresa pública española es diferente al propósito que se había planteado días atrás y que tenía que ver con mantener sus inversiones en este lado del Atlántico.
Así lo señalaba el comunicado de Canal de Isabel II del pasado 27 de abril, en que el Consejo de Administración de la empresa pública acordó, a propuesta de su presidente, tomar actuaciones urgentes presentado por el director general tendentes a asegurar el máximo control, transparencia y eficacia en la gestión del Grupo Canal de Isabel II.
Entre las principales medidas estaban: 'El refuerzo de la organización de la empresa a nivel internacional, asegurando al máximo la gestión mientras el grupo mantenga su presencia en las inversiones actuales'.
Habló además del 'refuerzo de las áreas financieras, de control y contabilidad de todas sus filiales extranjeras'.
