La Torre Ejecutiva, que alberga por lo menos 50 habitaciones, y el Salón Patio Andaluz, con capacidad para 130 personas, serán los primeros espacios que sufrirán grandes intervenciones en el emblemático Hotel El Prado, que deberá recibir una inyección en su estructura por valor de $21.300 millones.
Lo anterior deberá ser ejecutado en cumplimiento con el contrato de concesión que firmó Fondo Nacional de Turismo, Fontur, y el Consorcio FTP el 7 de abril del año pasado. De acuerdo con ese documento, el complejo hotelero tiene plazo hasta el 7 de noviembre de 2018 para ejecutar estas y otras obras.
Para poder dar inicio al embellecimiento estructural de El Prado, la concesión y la firma Cabal Arquitectos, encargada de los estudios y diseños del plan de restauración, deberá presentar el proyecto al Ministerio de Cultura, teniendo en cuenta que el hotel es considerado un Monumento del Patrimonio Arquitectónico y Cultural del país.
Esta iniciativa, según información suministrada por Fontur a EL HERALDO, hace parte de la primera etapa de intervenciones y se encuentra en la etapa final de revisión y aprobación por parte de la Interventoría del Proyecto. Se calcula que en 15 días será entregado al Ministerio de Cultura.
La Torre Ejecutiva no se encuentra en funcionamiento hoy día y queda ubicada al fondo del hotel, después de la piscina del elegante El Prado. El Salón Patio Andaluz, por su parte, ha sido un célebre espacio bailable, desde su apertura al público en 1930.
Con respecto a la segunda etapa, Fontur detalló que contempla la rehabilitación completa de la Torre Clásica, espacio que compone las 133 habitaciones del hotel en funcionamiento actualmente– de las 274 que lo conforman–, el lobby, oficinas y unos siete salones.
Cuando se pongan en marcha las obras de esta importante área, el hotel tendría que pasar a funcionar–de decidir hacerlo– en la Torre Ejecutiva, que para ese tiempo ya debería estar rehabilitada.
Sobre esta intervención, Fontur precisó que FTP y Cabal Arquitectos se encuentran a la espera de los resultados definitivos de los estudios sobre las condiciones eléctrica e hidrosanitarias del hotel, así como de los resultados del estudio de patología y vulnerabilidad sísmica, para poder culminar los diseños.
El ente señaló además que, pese a que el concesionario 'tiene adelantado los diseños preliminares', la intervención debe ser tan especializada que las obras serán determinados por estos estudios diagnósticos.
Obras menores
Hasta el momento, los trabajos que se han realizado para rehabilitar el hotel son de carácter menor, entre los que se encuentran las limpiezas superficiales de fachada, desmanches de los pisos, impermeabilización de terrazas, cambio de alfombras y de tejas en mal estado.
Estas obras están en marcadas dentro del contrato bajo el concepto de 'pre inversión' y comenzaron a realizarse desde mediados del año pasado.
El Prado duró cerrado cerca de un mes en 2016 para facilitar el cambio de operador de este complejo. En ese tiempo que conoció que perdía cerca de $300 millones mensualmente y que tenía cuentas embargadas por la Dian.