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Rodrigo Obregón, hijo del pintor Alejandro Obregón, reveló la historia de una obra de su padre en las instalaciones del Hotel El Prado. Contó que en el año 1937, cuando el artista tenía 17 años, hizo un fresco en el salón Magdalena en el que unos faunos iban detrás de unas ninfas con pocas vestiduras.

Esta representación artística causó disgustos en la Iglesia Católica, religión que practicaba la familia Obregón, a la que amenazaron con excomulgar sino tomaban medidas en el asunto. Por lo que decidieron ocultar el mural.

'Lo que se debe investigar es si lo taparon con capas de pintura o si lo picaron de la pared', señaló el hijo del pintor.

La historia que contó el ex gerente del hotel Mario Venturini fue confirmada por Obregón hijo, y se suma a los hallazgos recientemente encontrados en el bar Caribe por el Consorcio FTP, que ya están siendo investigados por parte del Ministerio de Cultura, para identificar si se trata de un fresco, y además si es de la autoría de Alejandro Obregón.

Rodrigo Obregón precisó también que su padre frecuentaba las instalaciones de la ‘joya arquitectónica’ de Barranquilla, puesto que su familia estuvo involucrada con la construcción del hotel.

Añadió que para realizar la edificación, su familia contrató a un personal capacitado, que contó con la participación del arquitecto estadounidense Burdette Higgins. Además, resaltó que los constructores importaron todos los materiales para la obra.

Tita Cepeda, viuda de Álvaro Cepeda Samudio, quien fue muy amigo de Alejandro Obregón, relató que el salón Magdalena en la época en mención era un recinto mucho más pequeño, en comparación al que ahora se conoce.

'Le oí muchas veces a Alejandro decir que había pintado un fresco en el salón Magdalena del Hotel El Prado. Y también que en un momento dado tuvieron que taparlo, porque ciertas personas protestaron alegando que la obra atentaba contra la moral, a causa del erotismo que proyectaban las figuras', expresó.

Además, indicó que posiblemente se trataban de ninfas que se encontraban semidesnudas.

Para Cepeda, la única obra de Obregón en El Prado, contada por el mismo autor a sus amigos de la época, es la que fue descrita.

El Ministerio de Cultura entregará en los próximos días los primeros resultados de la investigación.