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Ante los ánimos caldeados en el Consejo Superior de la Universidad del Atlántico, el gobernador del departamento, Eduardo Verano, expresó que buscará 'un ambiente de unidad' dentro del cuerpo colegiado.

El mandatario, en tono diplomático, destacó que como presidente del Superior trabajará por aportar 'tranquilidad y cordura', a través de la estimulación de cada uno de los miembros.

'Nos vamos a dedicar a construir un buen ambiente. Voy a llamar y hablar con cada uno de los consejeros para escucharlos, estimularlos', expresó Verano ayer tras el lanzamiento de una estrategia educativa en Galapa.

División en el Consejo

La sesión del Consejo Superior del pasado martes se desarrolló en el despacho del gobernador entre discusiones reiteradas, gritos e insultos, por lo que fue suspendida bajo el concepto de falta de garantías.

De la reunión, se pudo conocer que los miembros solo pudieron avanzar hasta el segundo punto contemplado en el orden del día, que obedecía a un informe académico y financiero del nuevo rector, Carlos Prasca. Justamente, esta sesión era la primera en la que el recién elegido participaba bajo su cargo como rector en propiedad.

Si bien existen diferentes versiones sobre lo sucedido al interior del cuerpo colegiado, los consejeros coinciden en que las discusiones acabaron en la 'falta de respeto'.

De acuerdo con Prasca, la reunión comenzó con desacuerdos en la aprobación del orden del día, algo en lo que aseguró 'nos tardamos una hora en decidir'. En temas como la administración de actas o el contenido del informe del rector sobre la rectoría saliente, precisó, se tardaron unos 40 minutos más.

Iniciada la exposición de Prasca, uno de los puntos más álgidos en su intervención fue el anuncio de la próxima acreditación de cuatro programas en la UA–de los ocho negados por el Ministerio de Educación.

Sobre esa noticia, expresó Prasca, se originaron varias desavenencias. Roberto Figueroa, representante de los docentes en el Superior, expresó a EL HERALDO cuál fue su observación durante la sesión.

'Ese anuncio fue aberrante, no es ético, es cuestión de politiquería. Lo que hizo el Ministerio fue presionar con las acreditaciones para que cuando Prasca fuera elegido quedara como un Mesías', dijo Figueroa.

Al parecer, estas consideraciones fueron el ‘detonante’ de otras discusiones. De acuerdo con Jhonatan Camargo, el representante de los gremios, César Lorduy, 'interrumpió una y otra vez al docente e increpó con insultos al representante estudiantil, con lo que logró enrarecer por completo el ambiente de la sesión'.

Frente a los señalamientos hechos por Camargo, Lorduy se defendió y explicó que intervino porque no dejaban desarrollar con normalidad la sesión. 'Yo les dije que si lo que querían era que esos programas no se acreditaran bajo el trabajo de Prasca para que él recibiera aplausos, eso no tenía sentido'.

Según coinciden, entre estas perspectivas y otras denuncias por supuestos nombramientos irregulares y cadenas de whatsapp anónimas, se abrió espacio para discusiones de tipo personal. 'Se dijeron palabras altisonantes', dijo Prasca.

Ante la situación, Verano decidió levantar la sesión. 'Se paró de la mesa por falta de garantías', señaló Lorduy.