En el cierre del segundo periodo de sesiones ordinarias, el Concejo de Barranquilla aprobó tres iniciativas. La primera tiene que ver con la modificación del Acuerdo que le dio luz verde al proyecto de vivienda ‘Lluvia de Oro’, en el que se reubicarán 712 familias de la Bendición de Dios y otro grupo que residían en zona de riesgo, a orillas de los caños, pero que actualmente viven en arriendo.
El concejal Óscar David Galán, ponente de esta iniciativa, explica que el proyecto de vivienda tiene un valor de $10.000 millones de los cuales $1.500 millones fueron incluidos en el Presupuesto general de Gastos e Inversiones de 2017. Otros $8.500 millones serán incorporados en el presupuesto de 2018 ($4.000 millones) y el restante en la vigencia 2019 ($4.500 millones).
En el proyecto de viviendas de interés prioritario ‘Lluvia de oro’, que estará ubicado en la prolongación de la calle Murillo cerca de Granabastos, se levantarán 712 casas para igual número de familias que fueron afectadas por las inundaciones que produjo el desbordamiento de los caños en la Cuenca Oriental.
La obra se financiará con recursos del Distrito y los subsidios nacionales que recibe a través del Ministerio de Vivienda.
La segunda iniciativa aprobada por el Concejo es la modificación del Estatuto Tributario de Barranquilla, con la cual se faculta a la Administración Distrital para emitir una resolución que permite compensar deudas con la ejecución de obras de infraestructura. Esta modificación beneficia especialmente a las empresas que efectúen desarrollos urbanísticos, como los planes parciales.
La modificación del Estatuto también faculta al Distrito de Barranquilla a exonerar del pago de las estampillas Pro-cultura y Pro-tercera edad a las empresas o personas naturales que firmen contratos con la Alcaldía o los institutos descentralizados con fines de apoyo logístico para los Juegos Centroamericanos.
Finalmente, la Corporación edílica dio vía libre al Proyecto de Acuerdo por medio del cual se le asignan las mismas funciones del Alcalde Mayor a los alcaldes de las cinco localidades que funcionan en el Distrito. Esta medida, según concejales, se toma con el fin de que la administración central cumpla sus indicadores de gestión y metas.