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De solo pensar en la graduación, Elizabeth Taborda dijo que no consiguió dormir en la noche anterior a la ceremonia. Por eso ayer se despertó y se arregló temprano. Esta vez no para salir a reciclar por el centro de Barranquilla, sino para recibir su diploma de grado.

Ayer, con Taborda, el Distrito graduó a 32 habitantes de la calle, que validaron durante siete meses sus estudios de primaria básica. Es decir, primero, segundo y tercer grado.

'Yo jamás pensé que lo lograría. Se siente una emoción muy grande porque ya estoy aprendiendo a leer y escribir', expresó Taborda, una recicladora de 40 años.

Recordó que, los problemas familiares, la falta de recursos económicos y el abuso de las drogas le arrebataron la oportunidad de educarse. Con su diploma en mano, ahora asegura que 'no habrá nadie que nos pare'.

Entre sus nuevos propósitos está escrito terminar los estudios, graduarse de bachillerato y conseguir un trabajo.

'Todos mis familiares están muertos y en el cielo, pero sé que ellos están orgullosos de esto. Mi felicidad es muy grande', dijo la oriunda de Cartagena, encargada de ofrecer el discurso del graduando.

El programa

El sueño cumplido de los 32 habitantes de la calle es el resultado de un curso de aprendizaje rápido, gestionado por la Alcaldía de Barranquilla a través de su Secretaría de Gestión Social y en coordinación con la Secretaría de Educación.

De acuerdo con Luisa Mora, coordinadora del Hogar de Paso que atiende a más de 300 habitantes, los graduados asistieron cuatro horas diarias, de lunes a viernes, a clases donde aprendieron lectura, escritura y matemáticas.

El propósito de este tipo de estrategias, según la primera dama del Distrito, Katia Nule, es la de dignificar la vida de aquellas personas 'que lo único que les faltó en la vida fue una mano amiga'.

'Salimos en el Carnaval y toda Colombia se dio cuenta. Hemos logrado darles alegrías en campeonatos de fútbol, ofrecerles baños, cortes de cabello, un hogar. Ahora también pueden culminar sus estudios y ser más preparados. Nos llenan de orgullo', manifestó Nule, entre aplausos.

Mora, por su parte, dejó escapar varias lágrimas durante su discurso. Recordó en qué estado recibió a la mayoría de ellos y expresó que 'no puedo contener la emoción de verlos en toga y birrete'.

Mencionó la historia de Maribel Gutiérrez, quien por muchos años fue reconocida popularmente como ‘Bazuquita’, al ser víctima de las drogas y pasar sus días en la calle 72. 'Ella llegó a nuestro hogar arrastrándose', contó Mora, mientras señalaba a la graduada, que sostenía con orgullo su diploma.

'Me alegro de corazón al verlos a cada uno de ustedes. Más que por los logros, por este amor que tengo para ustedes y por el que ustedes me dan a mí cada día', dijo la líder del programa.

En Barranquilla, se calculan que hay unos 2.072 habitantes de la calle, según el más reciente censo de la Secretaría de Gestión Social.

De esos, unos 120 son acogidos en el Hogar de Paso que dispone el Distrito y al menos otros 120 son atendidos o beneficiados de los programas que impulsa la Alcaldía.

El próximo paso para los graduados es culminar sus estudios en los grados cuarto, quinto y séptimo, para así después ingresar a bachillerato.