Estaciones con huecos en el techo, luces en mal estado, puertas que no funcionan, buses sucios y con fallas en el aire acondicionado, son algunas de las condiciones que 'empañan' el servicio del Sistema de Transporte Masivo, Transmetro.
Un equipo periodístico de EL HERALDO realizó un recorrido por las estaciones de Transmetro y en los articulados en los que se evidenciaron las deficiencias del sistema.
Durante el recorrido se pudo constatar que las 284 puertas que tienen las estaciones permanecen abiertas, lo que representa un riesgo para los usuarios del sistema. Transmetro sostiene ellos deshabilitaron las puertas porque, después de una inversión, solo estuvieron 12 días en buen estado.
Desde que empezó a funcionar el sistema, en 2010, la falta de un mantenimiento constante y el accionar de los vándalos han ocasionado los daños. Las empresas responsables del sistema anunciaron un plan de mantenimiento tras un trabajo publicado por este medio en el que se mostró el estado de los vehículos. Transmetro dice que las inversiones se han hecho, pero el estado de deterioro persiste.
En desarrollo del recorrido se evidenció que en la Estación Esthercita Forero, el acceso para salir por la calle 69 no estaba habilitado y las puertas permanecían abiertas, un panorama que se repitió en el resto de las 14 estaciones.
En la estación Alfredo Correa de Andreis, ocho niños jugaban cerca de las puertas, exponiéndose a una caída.
'Lo mejor de todo es que las pocas que están cerradas o a veces no quieren abrir. Qué curioso', señaló Orlando Mizan, un usuario de 65 años.
En las estaciones La Catedral, La Arenosa y Chiquinquirá los techos y las luminarias están dañados. Los usuarios creen que la falta de mantenimiento del sistema lo lleva a este 'estado deplorable'.
A través de la red social Facebook Andrea Mercado cuestionó la falta de mantenimiento y reclamó más seguridad para estas zonas.
En la estación Atlántico, entre carrera 26 y 27, el daño en las puertas permitió que dos personas ingresaran sin pagar al sistema. 'Es el diario a vivir', dijo un joven, que prefirió no identificarse.
Las personas que utilizan las estaciones de La Veintiuna y La Catorce manifestaron que les molesta que solo esté habilitado un acceso.
'No sé por qué está cerrada siempre esa puerta. No es tanto caminar el largo trayecto, sino la inseguridad y oscuridad de la calle en la noche', señaló Ana Arenales.
Las estaciones La Ocho y Buenos Aires también tienen daños en el techo y luminarias. En Joaquín Barrios Polo, Pedro Ramayá y Pacho Galán, la suciedad, un perro y una vendedora de dulces fue lo que sobresalieron de ellas, respectivamente.
El Portal de Soledad, en la prolongación de la Murillo, los usuarios se quejan por la suciedad y la pobre estructura que se construyó. Además cuestionan la demora de las rutas alimentadoras.
'Deben mejorar los tiempos en que sale un bus y solucionar la suspensión de rutas como la del barrio La Central. Ya sea con la presencia de policías o alguna otra medida, porque muchos nos toca coger una mototaxis u otro bus', señaló Lorenzo López, un pastor evangélico de 51 años.
Sobre las estaciones Barrio Abajo y Parque Cultural del Caribe la queja frecuente fue falta de aseo y la congestión de personas.
Con relación a la estación retorno Joe Arroyo, las quejas estuvieron relacionadas con las largas filas que deben hacer para abordar un articulado, principalmente durante las horas pico.
Adriana Fernández, quien dice utilizar el servicio a diario, expresó que son muchas las personas que llegan después de 5:00 p.m. para 'tan pocos buses que se ven en el lugar'.
'A veces hay buses parqueados y no salen, mientras aquí hay cientos de personas', señaló la mujer.
Daños en buses
Los usuarios nuevamente se han quejado por el mal estado de los aires acondicionados en los vehículos. A través del servicio Wasapea a EL HERALDO (3104383838) expresaron su inconformidad por la falta de mantenimiento de los aires y la suciedad de los buses, especialmente los articulados.
En el articulado de placa interna TM 21025, por ejemplo, el aire acondicionado no enfriaba adecuadamente el viernes. Por eso, algunas personas optaron por hacer abanicos improvisados con periódicos o revistas.
El bus TM 21038 tenía el cableado del sistema de aire acondicionado al descubierto. En los articulados y busetones algunas sillas y paredes están rayadas.
Los usuarios, sin embargo, coinciden en que el servicio es útil y por eso es necesario que el sistema tenga mantenimiento permanente.
'Me gasto un solo pasajes para ir hasta desde el sur hasta el norte y viceversa. Por eso es bueno, pero deben arreglar los inconvenientes', manifestó Nailed Bernal.