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Tras la visita del papa Francisco a Colombia, los obispos de la Iglesia católica se reunieron durante tres días para analizar la ruta de la reconciliación y la paz.

Al termino del encuentro, los jerarcas de la iglesia entregaron un mensaje de reconciliación, pero con el río Magdalena. Fue así como en el malecón del Puerta de Oro realizaron un acto simbólico en el que invitaron a los habitantes de la Costa Caribe a cuidar el agua y proteger los cuerpos de agua de esta zona de esta región.

En el acto participaron el arzobispo de Barranquilla, monseñor Jairo Jaramillo Monsalve; el arzobispo de Cartagena, moseñor Jorge Enrique Jiménez Carvajal; el obispo de Valledupar, monseñor Oscar Vélez; el arzobispo de Riohacha, Héctor Salah Zuleta; el obispo de Apartadó, monseñor Hugo Torres Marín; el obispo de Montelibano, monseñor Luis Rueda Aparicio; el obispo del Banco, Luis Gabriel Ramírez; el obispo de Sincelejo, monseñor José Clavijo y el obispo de Magangué, monseñor Ariel Lascarro Tapia.

Durante el evento, los prelados coincidieron en que el agua no ha recibido el trato adecuado y localizaron los sitios en los que se ve una mayor problemática de contaminación del preciado líquido. 'En el sur de Bolívar, Córdoba, el bajo Cauca, el Cesar y La Guajira existe contaminación con tóxicos y metales pesados producida por la minería extractiva', indicó el arzobispo de Barranquilla.

Los obispos invitaron a que los caribeños asuman el reto de pensar y articular la vida alrededor del agua, además hicieron un llamado para mejorar las condiciones laborales de los pescadores. 'Lamentamos profundamente que la gran mayoría de los pescadores transcurran mucho tiempo en el río, el mar, lagunas y ciénagas con embarcaciones muy precarias', indicaron en un documento.