La innovación se instaló en la capital del Atlántico. Las nuevas experiencias del talento creativo que habita en la ciudad vienen dando frutos. No solo los jóvenes emprendedores que ponen en marcha sus ideas de negocio, sino también los colaboradores de las empresas, los representantes de la academia y demás grupos poblacionales vienen incorporando valores agregados a sus productos y servicios para impactar positivamente el mercado. Hoy, la competencia no es con la Región, sino con el mundo.
'Barranquilla es una ciudad que viene progresando de una manera acelerara, tanto en infraestructura como en servicios y en atracción de nuevas inversiones', dice Juan Palacio, director de MacondoLab, aceleradora de start-ups líderes en Colombia, de la Universidad Simón Bolívar.
Palacio afirma, además, que 'la ciudad se ha constituido como un ‘trampolín’ para el país hacia el mundo, tras la ejecución de las políticas desde la Cámara de Comercio, el sector público, la academia y las empresas, para que estas tengan, día a día, una mejor oferta de valor'.
José Polo, docente e investigador del departamento de Economía de la Universidad del Norte y Fundador del Centro de Excelencia en Sistemas de Innovación, explica que existen dos puntos importantes que han posicionado a Barranquilla en la materia: 'la primera, la conformación de un ecosistema de innovación, que se ha generado espontáneamente a través de iniciativas de distintos sectores, y la segunda obedece a que se está perdiendo el miedo a pedir recursos'.
Sobre la última, Polo Otero especifica que, en cuanto a los recursos dispuestos en el Fondo de Fomento de Innovación y Desarrollo Tecnológico del Sena, 'Barranquilla pasó de obtener $400 millones a conseguir $1.800 millones, aproximadamente'.
Con tecnología
Uno de los temas que marca la pauta, en materia de innovación, es la tecnología, un aspecto trasversal en el este mundo globalizado. Barranquilla y el Atlántico le han apostado con decisión.
Una de las grandes apuestas radica en la creación de un Distrito de Innovación. Camilo Cepeda, secretario de Tecnologías de Información y las Comunicaciones, comenta que 'el departamento tiene evidencia de muchas iniciativas relacionadas con la innovación y el emprendimiento'.
Cepeda Tarud agrega que 'hay un ecosistema de innovación con mucho potencial en el Atlántico y lo que queremos es alinearlo para que trabajemos con un norte muy claro y que ese trabajo se vea reflejado en la industria; eso es, básicamente, el significado del Distrito de Innovación'.
José Polo complementa 'es muy importante apostarle a temas de ciencia y tecnología como la inteligencia artificial, minería de datos, entre otros para que las empresas se apropien de esos recursos y puedan hacer más eficientes sus negocios'.
Destaca que 'tenemos una ventaja competitiva muy grande: contamos cerca con despensas agrícolas como los departamentos de Córdoba, Magdalena, Sucre y Bolívar, que nutren al Atlántico con muchos insumos, lo que se convierte en una oportunidad de tecnificación de procesos para vender soluciones agregadas a la industria de alimentos, bebidas, farmacéutica, etc.'.
El tejido
Juan Palacio, quien está en constante relación con los empresarios que acuden a MacondoLab, expresa que 'cuando hacemos mentorías con equipos de emprendedores, se destacan su pasión, determinación y convencimiento de que pueden generar cambios y construir tejido empresarial'.
Asimismo, Polo argumenta que 'el factor clave que ha generado la dinámica de innovación en Barranquilla y el Caribe es la inversión en la gente', ya que 'creemos en nuestra creatividad, espontaneidad, más allá del Carnaval, y que pueden generar valor para que ello se revierta en calidad de vida'.
Barranquilla sigue dando pasos importantes en el camino de la innovación, de aquella que se genera de cara al mundo, que busca soluciones globales. Bien lo decía el psicólogo y lingüista norteamericano, Alfred Kyorzybski: 'el mapa no es el territorio'.