La clínica Bautista, que por 65 años prestó sus servicios a la comunidad barranquillera y la región Caribe, cerró sus puertas y ahora, en su lugar, comenzará a operar un centro de trasplante de médula ósea.
Un fuente de la institución explicó a EL HERALDO que hace cuatro meses la institución fue cerrada, lo cual en su momento generó protestas por parte de los trabajadores, que se negaban a la clausura de la entidad, considerada a través los años como una de las mejores de la ciudad.
Actualmente la institución se encuentra en proceso de liquidación, según lo constatado en un documento de la Cámara de Comercio de Barranquilla.
Asimismo, explicó la fuente, sus instalaciones están en remodelación para que una vez estén listos los trabajos, empiece a operar la nueva clínica de trasplante de médula ósea de la ciudad. En un mes se proyecta su inauguración, de acuerdo con lo informado por la fuente.
La clínica Bautista fue una entidad prestadora de servicios de salud, de carácter privado y sin ánimo de lucro, que nació en el año 1957 en cabeza de los misioneros Bautistas del sur de los Estados Unidos, quienes siempre fueron los que la administraron.
En los últimos años la entidad empezó a tener un declive en el manejo financiero, pero esto no tuvo mucha incidencia en la prestación de los servicios que allí se ofertaban, puesto que continuó operando y ofreciendo una buena asistencia médica hasta la fecha que cerró, según los propios trabajadores.
'Esta era una institución de primera, que caminaba como relojito suizo. Se puede decir que era la mejor clínica que tenía Barranquilla para la época de 1957. La crisis llega a la entidad cuando los misioneros fueron dejando la institución al tiempo que se iban jubilando, luego pasó a manos de un médico bautista, y fue allí que empezaron los altibajos. Eso se veía venir', relató una de las pensionadas de la clínica.
Fueron varias las protestas que se generaron en las instalaciones de la institución por parte de sus trabajadores, que exigían el pago de sus salarios, prestaciones sociales y pensión. El ente le adeudaba a sus empleados, según lo referido por una de sus ex trabajadoras, varios años de servicio con la clínica. Hasta la fecha siguen las deudas.
'La clínica fue una de las mejores en las que he laborado, pero para nadie es un secreto que está pasando por una etapa difícil. Desde que salí, no me han dado razón del pago de mis cesantías, ni de mi liquidación. Me adeudan alrededor de $2 millones', dijo una ex trabajadora del área de cirugía de la clínica.
Urgencias, hospitalización, UCI, consulta externa, laboratorio clínico, servicio farmacéutico, especialidades quirúrgicas como lo son: cirugía general, urología, ginecología y otorrinolaringología, fueron algunos de los servicios que ofertaba la clínica Bautista antes de su cierre.
