Desde el salón 31k de la Universidad del Norte, un periodista barranquillero, con corazón catalán, conversaba con un español de alma colombiana. Se sentaron a ‘echar cuento’, recordaron momentos históricos y terminaron haciendo cuestionamientos de periodismo. Un oficio que aún ejercen a pesar de la era de Google, Facebook, Twitter e Instagram. Según ellos, estas herramientas 'no generan contenido, solo lo replican'.
'Rafa, ¿cómo ves de salud el Periodismo?', le pregunta el director de EL HERALDO, Marco Schwartz, al corresponsal de La W en España, Rafael Manzano.
'De hierro, pero está en crisis', le responde.
'Ha surgido una locura de que ahora cualquiera puede hacer periodismo pero yo pienso todo lo contrario, no todo el mundo puede ser periodista'.
Así comenzó la charla. Tirándole puyas al manejo de la información en un mundo tecnológico. Y es que ni las redes o el Internet hacen la noticia. La realidad es que la transmiten, en ocasiones, distorsionadas o con falacias. O como dijo Schwartz, las llamadas 'fake news'.
'Pero no son noticias falsas, ¡son mentiras!', replicó Manzano. 'Y nuestro trabajo es encontrar la verdad, despejar toda la mentira que aparezca en la red'.
Con respecto al trabajo de hacer periodismo, el barranquillero le preguntó al español si tenía un manual para el oficio. Manzano le dijo que 'curiosidad' es lo que más se necesita, aunque no menos importante que 'conocer, comprender, comprobar y contar'. Juntas conforman sus básicas '5 C'.
