El susto de su vida fue el que experimentó ayer Félix Gómez, de 72 años, cuando la pared de un edificio cayó desde el quinto piso sobre su habitación, que quedó destruida al igual que unos elementos clínicos con los que recibe un tratamiento de diálisis.
El colapso de la estructura, en la carrera 38 con calle 63B, del barrio El Recreo, no afectó la integridad del adulto mayor, quien minutos antes había abandonado el cuarto por la rabia que le causó que su familia le impidiera salir a la calle. Instantes después, a las 9:00 a.m., ocurrió el estropicio.
'Yo me encontraba sentado en esta banca de la terraza, cuando de pronto escuché una bulla. Pensé que dos carros se habían estrellado, pero vamos a ver que fue en mi cuarto', manifestó Gómez, mientras miraba lejos, como pensativo.
Aunque el accidente no dejó víctimas fatales, sí ocasionó destrozos en las dos plantas de la casa, quebró las láminas de la cubierta, afectaciones a los electrodomésticos, daños en el patio y en otra habitación ubicada en la parte superior de la residencia, por una cuantía de $50 millones aproximadamente.
De acuerdo con la abogada de la familia, Ligia Agredo Díaz, la encargada de responder por las destrucciones es la aseguradora de Hama, firma que administra el establecimiento donde funciona un centro de eventos y un restaurante. 'Voy a empezar por una reclamación con la aseguradora. Ellos van a ser reubicados en otro lugar con la intención de prevenir otro daño de mayor magnitud', señaló la defensora.
Por su parte, una fuente cercana a Hama confirmó que los afectados serán trasladados a un hotel de la ciudad, mientras se supera la emergencia. Asimismo, los equipos médicos van a ser reintegrados al paciente.
Según las versiones de los testigos, los vientos de la mañana y la montura de unos aires acondicionados habrían provocado el accidente que por poco termina en tragedia.
Quejas de la comunidad
De acuerdo con los vecinos del sector, tres casas, incluyendo la afectada, se encuentran vulnerables ante la caída de elementos de construcción desde la edificación, la cual no emplea medidas de protección a las personas, según lo ordenado en el artículo 39 del Decreto 1469 de 2010, por lo que desde 2016 presentaron sus quejas a la Secretaría de Control Urbano y a la Personería.
'El agua residual, cuando llueve o lavan algo del edificio, pasa al patio de mi casa, se está filtrando y las paredes se están rajando', aseguró Jaime Jaraba, habitante de El Recreo.
El otro caso expuesto es el de Ivette Hernández, propietaria de una de las viviendas que al parecer está afectada por la problemática. También denunció la caída de objetos a su patio, lo que ha producido algunos daños.
'Tengo dificultades desde que se inició la obra hace cuatro años. En el patio tengo problemas y no me lo han solucionado', sostuvo.
Finalmente, el secretario de Control Urbano y Espacio Público, Henry Cáceres, le confirmó a EL HERALDO que el edificio 'sí tiene licencia' de construcción. En consecuencia, les recomendó un plan de contingencia para atender las quejas de la comunidad.
