Cansados por los malos olores que brotan del arroyo El Salao II se encuentran los habitantes de un sector del barrio El Edén, en el suroccidente de Barranquilla.
Los residentes de la zona aseguran que la situación se viene presentando desde hace siete meses, debido a que las aguas negras provenientes de varios conjuntos residenciales fueron desviadas hasta el cuerpo de agua.
Carmen García, quien vive desde hace 8 años a pocos metros del arroyo, sostuvo que la problemática se ha vuelto 'insoportable' en las últimas semanas, debido a las lluvias que han caído en la ciudad.
'Estamos molestos por esta situación, han vuelto al arroyo en una cloaca. Nosotros tapamos una de las ‘tuberías artesanales’, pero ahora el agua sale por otro lado', dijo la mujer.
Además, García aseguró que en la zona reside un alto número de niños y adultos mayores, que han presentado algunos quebrantos de salud relacionados con los 'nauseabundos olores que provienen del canal'.
Domingo Machado, líder de la zona, también expuso que el problema se ha incrementado debido a las descargas directas de alcantarillado al arroyo.
'Hemos descubierto que hay casas en barrios cercanos que descargan las aguas negras de forma directa al arroyo, lo que incrementa los niveles de contaminación del agua', expuso.
