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Son muchas las personas que para esta época del año se dan a la tarea de ayudar a los más necesitados.

Uno de esos casos es el de Patricia Fernández Martínez, una mujer que desde hace 15 años y todos los 24 de diciembre, les lleva alegría y el espíritu navideño a cientos de menores de edad de los sectores más vulnerables de la ciudad.

Patricia y un grupo de varios amigos empiezan a organizar desde el 20 de octubre la jornada denominada ‘Mi sonrisa’, la cual este año cuenta con el apoyo de la empresa Postobon.

'Esta iniciativa nació a raíz que no tuve una infancia feliz y por eso me di a la área de llevarles una sonrisa a esos niños que no tienen nada', dice Patricia Fernández.

La actividad la ha llevado a barrios como La Sierrita, Las Américas, Siete de abril y Santuario, entre otros sectores. Este año llevará juguetes y comida a los niños y niñas venezolanos que residentes en los alrededores de la Terminal de Transporte y en la Cordialidad con Circunvalar.

'Lo más importante y bonito es la sonrisa que logramos sacarles a esos niños y niñas que merecen todo el amor del mundo', dice Patricia Fernández.

Amanecer feliz del habitante de la calle

Otro grupo de personas que desde hace 25 años se preocupa por los habitantes de la calle es el que integran las redes de apoyo y comunicación adscritas a la Policía Metropolitana de Barranquilla.

Este próximo 16 de diciembre, desde las 4 de la madrugada hasta las 11 de la mañana, en actividad que se llevará a cabo en la carrera 38 con calle 17, en el Hogar de Paso de los habitantes de la Calle, en el barrio Rebolo, la cual está a cargo de la Secretaría de Gestión Social del Distrito serán atendido cerca de 800 habitantes de la calle.

En la actividad denominada ‘Amanecer feliz del habitante de la calle’, a estas personas se les baña inicialmente, luego son peluqueados, se les atiende en la parte odontológicas y se les entrega un cepillo de dientes. Posteriormente se dota de ropa en buen estado y se les brinda un desayuno, en medio de actividades de apoyo de pastores y sacerdotes que los acompañan.

Despliegan actividades de carácter cultural y recreativo y reciben atención en salud por parte de la Secretaría Distrital de Salud, e incluso se dispone de ambulancias para transportarlos en los casos que sean necesarios al hospital. También son vacunados.

Para el logro de la actividad, cada red de apoyo hace un aporte económico, el cual es utilizado, con ayuda de benefactores, en la elaboración de desayunos, sancocho, pasteles, frutas, etc.

'En esta época del año, y ojalá fuera todo el año, hay que ser solidarios con los que nos necesitan', dice un integrante de una de las redes de apoyo.