La Gobernación del Atlántico, a través de la Secretaría de Salud Departamental, se encuentra supervisando la calidad del agua de cada uno de los acueductos de los municipios del departamento.
El proceso involucra a ingenieros, científicos y técnicos de Salud Pública, quienes realizan el control y análisis diario de la calidad del agua que beben y utilizan los habitantes de todos los municipios y corregimientos.
El secretario de Salud Departamental, Armando De la Hoz, explicó que los índices de riesgo de calidad del agua han venido mejorando cada día. 'En este momento están por debajo del 5 % en todos los acueductos, lo que nos asegura que estamos impactando positivamente la calidad de vida y el bienestar de los habitantes de municipios y zonas rurales', manifestó el funcionario.
Por su parte, el ingeniero Jorge Villarreal, encargado de la vigilancia de la calidad del agua en el Atlántico, señaló que para esta labor de revisión, los vehículos salen previamente desinfectados y acondicionados con los equipos y el personal idóneo (técnicos certificados en toma de muestra de agua). 'Una vez tomada la muestra, es refrigerada y llevada a un laboratorio para ser analizada. Los acueductos toman sus propias contra-muestras para analizarlas en sus respectivos laboratorios, garantizando así un doble control', detalló el experto.
Asimismo, indicó que el procedimiento se realiza de acuerdo a la metodología y estándares del Instituto Nacional de Salud (INS), con el fin de garantizar la trazabilidad de la muestra. 'En el Laboratorio de Salud Departamental se hacen análisis físicos, como la turbiedad, color y en la parte química se detectan compuestos que puedan representar algún riesgo', precisó.
Las autoridades aseguran que cuando el agua resulta no apta para el consumo humano se hacen los requerimientos respectivos al operador, se inician las investigaciones del caso, y si es pertinente, se aplican las medidas sanitarias y de seguridad.
El resultado de estas muestras se socializa con las autoridades municipales.
