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Decenas de residentes de Puerto Colombia, autoridades locales y departamentales no querían perder la oportunidad de ver el inicio de la demolición de uno de los símbolos más importante del municipio: El muelle.

Algunos vieron el inicio de las obra con tristeza y otros solo destacaban la importancia que a futuro podría generar la reconstrucción de ese emblemático lugar.

La demolición arrancó ayer, a las 9 de la mañana. Una retroexcavadora de brazo largo comenzó a picar la placa de la estructura a unos 50 metros del inicio del muelle.

Los sonidos del taladro, el murmullo de los curiosos, el ruido que los escombros hacían al caer, sumado al sonido del mar, fue la banda sonora del momento.

Los pedazos de la estructura fueron cayendo sobre una barcaza ubicada debajo de la estructura, una hora después terminó hundida por el peso de los materiales que se desprendían y la maniobra fue cambiada.

Posterior a este episodio y tras 20 minutos de estar frenados los trabajos por lo ocurrido, los ingenieros determinaron comenzar nuevamente la demolición, pero esta vez en el comienzo del muelle.

'Yo estoy esperando para que me den un pedazo de escombro, quiero conservar en mi casa un trozo de la historia de este país', dijo Lucila Palacios, mientras observaba desde la orilla los trabajos.

Uno de los restaurantes ubicados justo frente al muelle, propiedad de Omar Macías, dispuso de unas sillas en las afueras de local para que los curiosos se sentaran a observar los trabajos.

'Para los empresarios, y todos los porteños, es bienvenida la obra, por el turismo, esto nos va a ayudar a impulsar la economía del municipio y para mí son excelentes los beneficios que llegarán con el proyecto diseñado para este punto', anotó Macías con la vista hacia la estructura.

Jairo Jiménez Hernández, habitante de Puerto, se sentó en una de las rocas del espolón frente al muelle. Allí permaneció mudo mirando los trabajos por más de una hora.

'Veo con tristeza como se derrumba un patrimonio. Siento mucha nostalgia por lo que está pasando. Sé que esta situación se da por no cuidar la estructura. Imagínese si decidieran tumbar el Coliseo Romano por estar viejo', se preguntó Jiménez.