Compartir:

En Barranquilla no hay preocupación por la calidad del aire como sucede en otras ciudades del país. Sin embargo, en el encuentro donde el tema principal es el aire limpio y sus efectos en la salud, se habló de los niveles de contaminación que podrían estar incrementándose en la ciudad y que no se estarían registrando.

En el primer día de agenda del séptimo Congreso Nacional y Conferencia Internacional de Calidad de Aire y Salud Pública (CASAP) que se lleva a cabo en Uninorte, el conferencista Prashant Kumar, profesor de la universidad de Surrey (en Inglaterra), señaló que pueden haber zonas específicas de la ciudades en donde los valores sean muchos más altos y no se estén determinando. 

Sobre esto, Julián Fernández, docente del departamento de Salud Pública de Uninorte, dijo que en el caso de Barranquilla esta situación podría estar ocurriendo, teniendo en cuenta que solo hay tres estaciones de monitoreo que no estarían siendo suficiente para el tamaño de la ciudad. 

Para el experto en temas relacionados con el impacto de la contaminación del aire en la salud, en Barranquilla hay que estar en alerta porque su crecimiento acelerado contribuye a que de la misma forma se incrementen los efectos contaminantes, sobre todo por un factor: el parque automotor, que según las cifras mundiales contribuye en un 75% en la contaminación del aire. 

'Probablemente en la ciudad el problema sea más grande de lo que se ha dicho hasta ahora. Las pequeñas partículas diferentes a las que reconocemos están suspendidas en el aire ocasionando grandes efectos en la salud '. 

A estos efectos se exponen quienes viven por ejemplo, cerca de una vía de alto tráfico. 

'La situación aumenta la probabilidad de enfermedades en adultos mayores y niños menores de 15 años, quienes podrían verse sometidos a enfermedades crónicas respiratorias como asma y enfermedades pulmonares', explicó Laura Rodríguez, docente de Salud Pública de la Universidad de Santander. 

Los expertos coinciden en que la calidad del aire es un tema que se debe poner en la agenda pública, de las ciudades y departamentos, porque exponerse al aire contaminado no es una elección que pueda tomar el ciudadano, sino que depende de la política pública que se establezca en los usos de suelo y en los determinantes para el crecimiento y desarrollo de las ciudades. 

'A raíz de la urbanización la contaminación ha aumentado. La ventaja de Barranquilla es que los contaminantes se dispersan gracias al viento y a que tenemos un pulmón como Isla Salamanca que debemos preservar', dijo Dayana Agudelo, docente de Ingeniería Civil y Ambiental.

Durante el congreso, también se habló sobre los desarrollos tecnológicos para monitorear la calidad del aire que están siendo presionados por la necesidad de identificar nuevos efectos que hasta hoy podrían ser desconocidos. 

La programación del congreso, incluye el informe de la calidad del aire en Colombia, a cargo de la directora general del Ideam, Yolanda González. 

Impacto y menos CO2

El Gas Natural Vehicular se ha convertido en una alternativa para la movilidad sostenible, y su uso en el transporte masivo de pasajeros y de carga representa reducción de emisiones contaminantes y 25% de ahorro en costos de operación frente a la gasolina y el diesel. 

Con este enfoque se analizó en el panel la ‘Calidad del aire en las principales ciudades y regiones del país: experiencias, retos y oportunidades al implementar tecnologías dedicadas a gas natural en los sistemas de transporte público’, el cual tuvo como moderador a Orlando Cabrales, presidente de Naturgas. 

Los impactos que han generado el uso de transporte con tecnología a gas natural y con el sistema masivo de Cartagena fueron destacados por los participantes. 

Orlando Cabrales destacó el compromiso de la administración distrital para promover el uso del GNV en Barranquilla, aunque pidió al Gobierno nacional que dé los pasos para promover la inversión de estas tecnologías y la regulación que permita obtener los beneficios tributarios como la exclusión del IVA.

Libardo García, director de Área Metropolitana de Barranquilla (AMB), dijo que hay compromiso para con las tecnologías de GNV mejorar la calidad del aire en la ciudad.

Anderson Díaz, coordinador de mantenimiento de Transcaribe en Cartagena, dijo que con los 322 buses de GNV han dejado de emitir 70.000 toneladas de dióxido de Carbono.