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Cincuenta uniformados de la Policía Militar se encuentran custodiando, en horas pico, ocho estaciones del servicio Integrado de Transporte Masivo de pasajeros de la ciudad, Transmetro, con el fin de 'garantizar' la seguridad y la tranquilidad de los usuarios.

De acuerdo con la estrategia, que arrancó el 9 de septiembre, los efectivos operan desde las 5:00 a.m hasta las 8:00 a.m, en las estaciones Portal de Soledad, Pedro Ramayá Beltrán, Pacho Galán y Joaquín Barrios Polo; mientras que en horas de la tarde, desde las 5:00 p.m hasta las 8:00 p.m, hacen presencia en Joe Arroyo, Esthercita Forero, Alfredo Correa y La Catedral.

De acuerdo con el Sistema, el personal uniformado se rota durante los días de la semana en las estaciones intermedias catalogadas como las de mayor afluencia de usuarios en horas pico; sin embargo, la presencia de los efectivos es fija durante los horarios mencionados en las estaciones La Catedral y Portal de Soledad.

La estrategia se consolidó luego de que en junio pasado el coronel del Ejército René Calderón Rangel, comandante del Batallón Policía Militar No. 2, visitó junto al gerente de Transmetro, Ricardo Restrepo Roca, las estaciones Joe Arroyo, La Catedral y el Portal de Soledad para conocer de cerca cómo funciona el sistema.

Durante ese recorrido el personal evaluó las oportunidades de acciones conjuntas en beneficio de los ciudadanos, entre ellas la presencia de los uniformados en las estaciones.

Precisamente el coronel Calderón Rangel, en diálogo con este medio, señaló que la estrategia es de suma importancia, ya que busca consolidar la confianza de los usuarios en el sistema a través de la seguridad.

'En el corredor de Transmetro tenemos desplegados los uniformados a fin de que la ciudadanía pueda sentirse segura. Buscamos también de que se roten en las estaciones y en los horarios. Queremos que los pasajero estén seguros durante los viajes que realicen hacia sus destinos', manifestó el comandante del Batallón Policía Militar No. 2.

El uniformado explicó también que los efectivos tienen la facultad de detener, en coordinación con la Policía Nacional a cualquier persona que se encuentre 'alterando' la tranquilidad del sistema, ya sea que se encuentre realizando un cosquilleo o que estén haciendo algo en contra de la cultura del Transmetro.

'Las personas que puedan estar incurriendo en una falta pueden ser llevadas a la URI en coordinación de la Policía para que sean judicializadas', explicó Calderón Rangel.

Los agentes solo hacen presencia en las entradas de las estaciones, sin pasar de los torniquetes hacia el interior de las paradas de los buses.

De acuerdo con la Policía Metropolitana de Barranquilla en lo que va del año se han registrado 15 hurtos en la modalidad de cosquilleo y se han capturado a 34 personas por ese delito.

Ricardo Restrepo manifestó que la presencia de la Policía Militar en Transmetro obedece a la necesidad de estrechar vínculos interinstitucionales entre la Policía, el Ejército colombiano y el Sistema Integrado de la ciudad donde se mueve un flujo importante personas.

'Esta es una estrategia de acompañamiento más que todo de colaboración para proteger y dar una sensación de seguridad importante y alrededor de las estaciones a los usuarios, incluso en los Portales. Esto no es una cuestión que esté todos los días, sino que se da de manera periódica dependiendo la disponibilidad de los efectivos', señaló Restrepo.

Policía Militar, destacó el gerente, vio en el Sistema un 'escenario importante' para mostrar que están ahí para darle protección a los ciudadanos.

Análisis. Para Gabriel Orozco Restrepo, experto en seguridad y director del doctorado Sociedad y Cultura Caribe de la Universidad Simón Bolívar la presencia de los uniformados en las estaciones es solo 'disuasoria' pues lo que se busca es generar una sensación de mayor seguridad y evitar así que haya algún tipo de bandas delincuenciales que se puedan filtrar en el Sistema.

'No es suficiente ese tipo de estrategia, en realidad se necesita mucha más videovigilancia y mucha más inteligencia para poder desarticular las redes, porque todo esto opera a partir de grupos que están bien organizados, que van desde el raponeo o hasta la comercialización. Es en esos factores donde se tiene que trabajar más allá con el apoyo de agentes de inteligencia', dijo el experto.

Orozco destacó que un punto importante es la capacidad que tenga el sistema judicial para poder procesar a los capturados. 'Nada se hace si las fuerzas de seguridad del Estado cogen o disuaden al crimen organizado si no hay un procesamiento o una medida que haga que a los delincuentes se les haga pagar por sus penas', apuntó.