Atraer inversión para mitigar los efectos del cambio climático es uno de los principales retos de los países de América Latina.
Así quedó evidenciado ayer durante el taller del programa de la Unión Europea para Cooperación Internacional Urbana entre países latinoamericanos y europeos, que se llevó a cabo en Cartagena con la presencia de más de 30 alcaldes.
Los mandatarios debatieron sobre la importancia de la financiación climática, teniendo en cuenta que la urbanización en América Latina y del Caribe es un 'proceso irreversible', ya que esta dinámica está convirtiendo a las ciudades en centros de actividad económica y social en una región donde cerca del 87% de la población ya vive en zonas urbanas y donde estas urbes ya generan cerca del 75% del PIB de sus países.
De acuerdo con el director del Programa Internacional de Cooperación Urbana en América Latina y el Caribe, Manuel Fuentes, las ciudades latinoamericanas buscan ser agentes que aporten soluciones a problemáticas como el cambio climático. No obstante —sostuvo— este objetivo choca en ocasiones con la realidad de no contar con los fondos suficientes para hacerlo.
Señaló que un informe del Overseas Development Institute (ODI) y de la Fundación Boll indicó que, en los últimos 20 años, tan solo el 10% de los 17.4 millones de dólares en financiamiento para el clima han llegado a gobiernos locales, y que lo han hecho de forma desigual, pues han aterrizado en mayor medida en los grandes países de la región, como Brasil y México.