Bastan 30 segundos de una acción tan sencilla como lavarse las manos para salvar muchas vidas a nivel mundial. Enfermedades de la piel, los ojos, diarreicas y respiratorias son algunas de las cuales se pueden evitar con una buena higiene de manos.
A propósito del Día Mundial del Lavado de Manos que se celebra cada 15 de octubre, un grupo de investigación de la Universidad Simón Bolívar, conformado por las enfermeras Gloria Lastre Amell, Joany Sarmiento Gutiérrez y Luz Fady Soto Rodríguez, precisó la importancia de este tema para la prevención de problemas de salud.
El lavado de manos con agua y jabón es uno de los procedimientos más seguros y económicos para prevenir enfermedades infecciosas, las cuales son la principal causa de mortalidad. Por ello, es trascendental promocionar el lavado de manos.
Estudios del Ministerio de Salud Nacional evidencian que las manos limpias salvan vidas. Así se interrumpe la cadena de transmisión de enfermedad diarreica aguda en más del 50 %, se disminuye en un 42,5 % la tasa de las infecciones respiratorias, y se minimizan las enfermedades cutáneas e infecciones en la vista, como lo son el tracoma y también las enfermedades intestinales parasitarias, como ascariasis y trichuriasis.
La prevalencia de infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria en países desarrollados se sitúa en 7,6 infecciones por cada 100 habitantes, mientras que en los países en desarrollo es de 15,5 por cada 100 personas, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los niños y niñas son –según la Unicef– especialmente vulnerables a los efectos de la diarrea y de las infecciones respiratorias, enfermedades que se pueden prevenir fácilmente y a bajo costo con un poco de agua y jabón.
Las enfermedades diarreicas e infecciones respiratorias causan la muerte de 3,5 millones de niños y niñas cada año y afectan a la salud de millones más, tanto en países en desarrollo como en países industrializados.
El lavado de manos se define como la aplicación de una sustancia detergente, en forma de barra o gel de jabón, sobre la piel húmeda de las manos y que añadida al frote mecánico de las mismas por unos minuto, luego de su enjuague, se realiza la remoción de microorganismos de la superficie de la piel.
A nivel personal, es importante el lavado de manos debido a que esta es una estrategia preventiva de manera muy efectiva que sirve para reducir la irritación por dermatitis, por condiciones alérgicas y de contacto. Esto quiere decir que el lavado de manos o la higiene son la mejor barrera contra las bacterias y la infección.
Esta breve acción se ha convertido en la estrategia principal para prevenir las infecciones que se desarrollan en una unidad hospitalaria, también llamadas infecciones Nosocomiales, de tal manera que lavarse las manos por 30 segundos reduce en 90% las bacterias.
El lavado de manos es la manera más simple que utilizan los profesionales de la salud como práctica en la prevención de infecciones asociadas a la atención en salud (IAAS).
La frecuencia del lavado permite eliminar gérmenes que son contaminantes y que han venido al individuo por otras personas, de superficies contaminadas o de animales y desechos. Estas infecciones constituyen un problema de salud muy grave, ya que este se encuentra entre las principales causas de mortalidad y de incremento de la morbilidad en las personas, especialmente en los países en vías de desarrollo.
Esta técnica tiene como objetivo el cuidado de las manos para prevenir y sobre todo manejar todos aquellos factores que comprometen la integridad del ser humano, en especial, los trabajadores del área de la salud. Los trabajadores de la salud generalmente conocen la importancia de la protección personal en el trabajo para prevenir la transmisión de enfermedades infecciosas y la exposición a sustancias químicas peligrosas.
Así mismo se deben conocer también los efectos que tiene el medio ambiente sobre la piel, como la dermatitis, en particular las producidas por las bajas temperaturas y el viento que causan excoriaciones de las superficies expuestas. Cuando la piel está irritada e inflamada, sus propiedades como elemento de barrera natural están comprometidas, haciéndola más susceptible a la penetración de elementos alérgenos o cuerpos extraños de cualquier índole.
En conclusión, las investigadoras enfatizan en que es importante el lavado de mano porque así se disminuiría la morbilidad y mortalidad de las personas.
En la vida cotidiana de cada persona, además, existen momentos claves que requieren de una higiene de mano que no se deben olvidar: después de tocar a la mascota y luego de ir al baño o antes de comer. Para los profesionales de la salud, el lavado de manos es una obligación que deben cumplir para con sus pacientes y que no puede ser omitido por ninguna circunstancia.