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Las autoridades marítimas anunciaron que reforzarán los controles de seguridad a las embarcaciones que arriben al puerto de Barranquilla, tras conocerse los nuevos casos de Covid-19 en Brasil, México y Ecuador.

El capitán de fragata Carlos Urbano, en coordinación con Sanidad Portuaria y la Alcaldía Distrital, han realizado una serie de reuniones técnicas y de verificación acerca de los controles preventivos que se vienen desarrollando, con el fin de minimizar cualquier tipo de riesgo con respecto a la emergencia por el coronavirus.

Explicó que inicialmente los protocolos eran aplicados a embarcaciones provenientes del continente asiático. Sin embargo, las inspecciones sanitarias ahora serán aplicadas a buques y embarcaciones de menor volumen procedentes de todos los países.

'Las medidas preventivas estaban enfocadas a buques que venían del continente asiático, pero debido a la proliferación y las comunicaciones que hemos recibido, ampliamos la información y los controles a todos los buques', señaló Urbano.

Aseguró que los controles están enfocados en verificar los últimos puertos a los que han llegado los buques y dónde han desarrollado operaciones. Así mismo, pedir una certificación del capitán del buque sobre la situación de salud de sus tripulantes y recibir copias del libro de sanidad de la embarcación, para finalmente mirar qué medidas extremar o qué condiciones adicionales se pueden adoptar, dependiendo la situación de cada uno.

Aseguró que en caso de hallar a un tripulante con síntomas sospechosos del virus, se activaría un protocolo de sanidad en el que el buque ingresaría a la zona de cuarentena para ser monitoreado y ser sometido a los controles correspondientes.

Explicó que indagarían si la embarcación tuvo actividad en el puerto de alguna ciudad con Covid-19 y si las fechas coinciden con las alertas.

De ser así, la tripulación estaría en aislamiento hasta que el personal médico de sanidad portuaria verifique el estado de salud del o los casos sospechosos.

En caso de dar resultado positivo, desembarcarían al contagiado y sería trasladado -con todos los protocolos de seguridad- al sitio estipulado por el Distrito para recibir tratamiento médico.

Con respecto al resto de la tripulación, estarían sometidos a una serie de exámenes médicos para descartar más contagios.