Tras el cierre de las estaciones del sistema de transporte masivo, el gerente de Transmetro, Fernando Isaza, explicó que la medida se tomó porque los usuarios no respetaron el aforo permitido para la movilización de pasajeros.
Desde la estación Joe Arroyo, donde supervisó la salida del último vehículo programado antes de la suspensión de la operación, Isaza manifestó que los ciudadanos no estaban atendiendo las recomendaciones, pese a que Transmetro despachaba más vehículos de los programados, justo para evitar las aglomeraciones.
'Los usuarios no respetaron el aforo. Tenemos las estaciones monitoreadas y si nosotros vemos que hay más usuarios que se quedan a una estación, nosotros despachábamos otros buses. Ayer (viernes), por ejemplo, hicimos más viajes de lo programado', manifestó Isaza.
El directivo dijo que la medida del alcalde Pumarejo era acertada, porque los ciudadanos no han tomado conciencia de que las aglomeraciones ponen en riesgo la vida de ellos y de los conductores.