33 indígenas Yukpas y 12 ciudadanos venezolanos que permanecieron durante varios meses viviendo en una de las orejas del puente de la calle murillo con Circunvalar, se regresaron a su país luego de ser sometidos a desinfección y control sanitario.
La Alcaldía de Barranquilla informó que el retorno de estos indígenas se dio por razones humanitarias ante la difícil situación económica y sanitaria originada por la COVID-19 que les estaba extremando sus precarias condiciones de vida, por lo que solicitaron ayuda de las autoridades, teniendo en cuenta que con ellos se encontraban muchos niños.
El operativo de retorno fue coordinado por la Secretaría Distrital de Gobierno, a través del Centro de Atención Local para Migrantes, y Migración Colombia, con apoyo de la Secretaría Distrital de Salud, que realizó los chequeos y medición de temperatura; de la primera dama del Distrito, Silvana Puello, quien les entregó ayudas alimentarias y juguetes; del ICBF, con la entrega de unos menores que estaban en custodia, y la Oficina para la Seguridad y Convivencia Ciudadana, con el acompañamiento de la Policía.