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Un gran porcentaje de la población infantil no está cumpliendo con los esquemas de vacunación. Hasta abril, de acuerdo con las cifras que entregó MiRed IPS, solo se han aplicado 11 mil biológicos, 45 mil menos que los suministrados a los menores en 2019.

La gerente de MiRed IPS, Martha Rodríguez, lanzó la voz de alerta tras indicar que hasta el mes de abril eran muy pocos los padres que habían llevado a sus hijos hasta los Puntos de Atención Oportuna (Pasos) para recibir las vacunas.

La funcionaria dijo que la situación es preocupante porque cree que las metas de vacunación no se cumplirán este año, una situación que le preocupa por la salud de los menores.

'Los niños no están siendo llevados a vacunar y el servicio está disponible. Si los padres salen de sus casas con todas las medidas pueden llevar a sus hijos, es un riesgo para los niños que no se les esté inmunizando', dijo Rodríguez.

La funcionaria extendió la invitación a los padres a realizar las vacunas en los puestos de la IPS, los cuales se encuentran solos y cuentan con todas las medidas de precaución como la distancia de más de un metro entre las sillas, la entrada de solo cinco personas, al igual que los encargados de la atención cuentan con todos los protocolos de bioseguridad.

La importancia de vacunar. Varios expertos consultados por EL HERALDO explicaron la importancia del esquema de vacunación. Coinciden en que el temor de los padres de sacar a sus hijos a la calle en medio de la pandemia sería una de las razones por las que no están vacunándose.

La pediatra Lourdes Romero explicó que los menores no pueden dejar de vacunarse, porque aparte del coronavirus hay otras enfermedades de las cuales deben ser inmunizados a tiempo ya que pueden ser mortales.

'No vacunarlos es peor. El riesgo es mayor del que lo están protegiendo ahora, que es la COVID-19. No se puede suspender la vacunación porque después el niño va a sufrir de otra enfermedad que puede ser mortal, como un sarampión, un polio que deja secuelas y otras más'.

La pediatra agregó que mientras los padres y las entidades cumplan con los protocolos preventivos, como el tapabocas, lavado de mano, aislamiento en los lugares de atención, uso del alcohol, al llegar a casa quitarse la ropa, lavarla y bañarse, no deberían de abstenerse de aplicarle la vacunación a los menores durante este tiempo.

'No vacunarlos es un problema que los deja sin protección; entonces hay que tratar de amortiguar la parte de contagio. Hay que hacerlo con todas las condiciones del caso porque no sabemos hasta cuándo estaremos con esta situación'.

Guillermo Cervantes, experto en virología, explicó que solo existen dos maneras de que una persona se haga inmune a los virus. La primera de ellas es que padezca de la infección y genere los anticuerpos contra ese microorganismo o virus, la segunda es la vacunación.

Según manifestó, por medio de la vacuna la persona recibe el mismo virus que produce la enfermedad, pero en ciertas condiciones; es decir, ya sea atenuado que significa quitarle la virulencia, o siendo inactivado por completo. Ante esto, la persona desarrolla anticuerpo contra ese virus que fue vacunado y queda inmune.

'Si nos referimos a niños específicamente, son una población que apenas está comenzando, no han desarrollado un buen sistema inmunitario y pueden ser atacados más fácilmente. Lo mejor es vacunarlos y no dejar que suceda una enfermedad directa por el virus', agregó.

Así mismo trajo a colación lo sucedido con la vacuna de la Hepatitis B, la cual era aplicada anteriormente a los niños a la edad de cinco años según el protocolo. Cuando se encontró que a la mayoría de los niños menores que sufrían de dicha infección, corrían el riesgo de padecer una enfermedad crónica, se decidió aplicar la primera dosis de la Hepatitis B al nacer un bebé.

'Es tan importante la vacunación que vemos que hay vacunas que deben ser puestas antes de que el niño salga de la clínica al nacer', culminó Cervantes.