Transmetro, el Sistema de Transporte Masivo de Barranquilla y su área metropolitana, atraviesa una fuerte crisis financiera que lo tiene al borde de una parálisis, que afectaría a los más de 30.000 usuarios que mueve actualmente.
Aunque la palabra crisis ha sido recurrente en los 10 años de funcionamiento de Transmetro, las medidas restrictivas del Gobierno Nacional para contrarrestar la propagación del nuevo coronavirus han agudizado los problemas financieros, al punto que los operadores cuentan con recursos para costear la operación hasta el próximo 27 de mayo.
Las empresas Sistur, Metrocaribe y Recaudos SIT Barranquilla –a través de una carta dirigida a Jaime Pumarejo, alcalde de Barranquilla; Fernando Isaza, gerente de Transmetro; y la Junta Directiva de Transmetro– revelaron que el déficit financiero asciende a cerca de $6.800 millones, desde que empezó la actual contingencia.
Según las estimaciones financieras presentadas por los concesionarios, el déficit llegaría a los $74.607 millones en diciembre del presente año (si la situación continúa), luego de ajustar la oferta a la reactivación gradual de la economía y garantizar una ocupación máxima del 35%, como lo exponen las directrices del Gobierno Nacional.
José Emiro Picón, gerente de Sistur, expuso que el sistema ya contaba con problemas financieros, los cuales se han agudizado por la reducción en el número de pasajeros. Explicó que, según el modelo financiero, los ingresos provienen exclusivamente de la tarifa que se cobra al usuario y que, en tiempos de normalidad, cubre el 80% de los gastos operacionales. Empero, en la actualidad solo llegan a cubrir el 20%.
'Pasamos de transportar 147 mil usuarios a 27 mil, por lo que se ha generado un déficit importante que nos ha impedido cumplirle a los proveedores. Esta insuficiencia de recursos hará que el sistema deje de operar después del 27 de mayo, porque no tenemos recursos para seguir trabajando', sostuvo Picón en diálogo telefónico con EL HERALDO.
El gerente de Sistur explicó que en la cadena de gasto, el combustible representa un 45%, mientras que el mantenimiento corresponde al 30%: 'El otro 15% son temas laborales, como pólizas, que no han sido canceladas'. Indicó, además, que la reactivación de otros sectores conllevará a la puesta en funcionamiento de más buses, lo que incide en el incremento del déficit.
Asimismo, expuso que las actuales condiciones han hecho que la tarifa técnica haya sufrido un crecimiento exponencial en los últimos meses, al punto que en mayo asciende a 10.609, lo que corresponde a un aumento del 368% en relación a la tarifa que cancelan los usuarios.
A su turno, Santander Castillo, gerente de Recaudos SIT, resaltó que en abril se firmaron otrosíes con la gerencias de Transmetro, por el orden de los $2.360 mil millones, para disminuir el déficit que se requiere para cubrir los costos de operación.
Por su parte, Juan Carlos Rodríguez, gerente de Metrocaribe, expuso que los tres concesionarios están 'comprometidos' con la prestación del servicio y el cumplimiento de las medidas impartidas por el Gobierno Nacional, aunque recalcó en la necesidad de contar con los recursos financieros que garanticen la sostenibilidad del sistema.