Residentes del barrio Los Campanos, segunda etapa, en el municipio de Soledad, se vieron sorprendidos por un vendaval que azotó el sector en la tarde del lunes, durante la lluvia que cayó en gran parte del municipio.
De acuerdo con los afectados, el fenómeno natural destechó más de 30 viviendas, por lo que el agua mojó colchones, electrodomésticos, opa y otros enseres.
Aseguran que funcionarios de la Alcaldía de Soledad se hicieron presentes en el lugar y realizaron un censo de las familias que resultaron afectadas en sus viviendas, pero que todavía no les han llevado las ayudas que les prometieron.
'Hay casas que quedaron hasta sin diez láminas de eternit y cada una cuesta alrededor de unos $35 mil. La gente a veces no tiene ni para la comida y ahora menos para comprar las láminas', dijo uno de los afectados.