Deteriorados, sin puertas ni ventanas. Otros totalmente corroídos por el óxido y desgastados por las inclemencias del clima. Así lucen algunos vehículos que se encuentran casi que abandonados por sus propietarios.
En años anteriores, EL HERALDO realizó el cubrimiento de algunos de estos vehículos que sin motivo aparente se encontraban parqueados indefinidamente en espacio público. En la actualidad, la problemática de los 'cementerios de carros' ubicados en distintos puntos de la ciudad sigue estando latente.
Las historias por las cuales los carros quedan 'abandonados' son diversas: algunas personas se niegan a dejar ir aquellas piezas metálicas que algún día tuvieron un valor sentimental y otros no han podido pagar sus reparaciones ni pueden costearse las acreencias en derechos de tránsito o comparendos.
Cualquiera que sea el caso, siguen allí obstaculizando la vía pública y así lo han denunciado algunos ciudadanos.
William Madiedo, habitante del barrio Chiquinquirá, reportó a través de la línea Wasapea a EL HERALDO que en su barrio se encuentran grandes cantidades de vehículos aparentemente abandonados. Afirmó que la presencia de estos vehículos es perjudicial para los moradores.
