La cuarta revolución industrial se instaló en el mundo impulsada por la pandemia de la covid-19.
En Colombia algunas personas y empresas estaban preparadas para enfrentar los retos de la virtualidad, pero otros no. Este panorama las obligó a adaptarse y enfrentar los desafíos de la digitalización.
Entre las estrategias que ha adoptado el Gobierno del presidente Iván Duque para disminuir la brecha de conocimiento en este ámbito se encuentra ‘Misión Tic’, un programa del Ministerio TIC que busca formar 100.000 programadores entre jóvenes y adultos.
El proyecto, que va por una segunda etapa, ya tiene este año 54.250 colombianos elegidos, cifra que, a la fecha, es la más grande que ha tenido esa cartera, superando en un 8.5% el número de seleccionados del 2020
Este programa de formación gratuita tendrá una inversión de hasta $85.000 millones y hace parte del paquete de reactivación económica que ha diseñado el Ministerio TIC.
La ministra Karen Abudinen explicó que para esta segunda ronda de estudiantes tenían previsto 50.000 cupos, pero fueron admitidos muchos más dada la acogida de la convocatoria.
Abudinen aseguró que el Ministerio TIC y varias entidades adscritas están comprometidas con tener 100 estudiantes de la cohorte pasada contratados y, según la consultora McKinsey & Company, en menos de cuatro años el déficit de talento humano en ese campo será de 112.000 programadores, lo que demuestra que será uno de los oficios de mayor empleabilidad.
En ese sentido, Abudinen reiteró que la pandemia ha demostrado que los conocimientos en materia digital y de programación son clave para la sostenibilidad de la gran mayoría de actividades.
'Detrás de cada sitio web que visitamos, juego de video, aplicación o programa que tenemos instalado en nuestro celular o computador hay una gran cantidad de profesionales, empresarios y emprendedores que aceptaron el reto de imaginar el mundo de otra manera. Gente que sin dejar de ser un usuario de la tecnología, también se convirtió en creador de soluciones para mejorar la calidad de vida de todos. A esas personas se les conoce como programadores'.
EL HERALDO entrevistó a varios de los alumnos beneficiados con el proyecto. Esta población va desde jóvenes recién graduados de la universidad hasta personas con años de experiencia laboral en distintas áreas del conocimiento, quienes coinciden en que esta es la profesión del futuro y que la pandemia aceleró la adopción de estas tecnologías.
Estos jóvenes coinciden en señalar que formarse en programación es la oportunidad de convertirse en un proveedor de soluciones en todos los campos, tanto para el emprendimiento personal como para suplir la demanda que el sector privado y el sector público requerirán en los próximos años.
