Monasito miní aká' (niño ven acá) o 'magende mí' (mi gente) son algunas de las expresiones que se enseñan en la institución etnoeducativa Paulino Salgado Batata.
Reconocer, apropiar y replicar la riqueza cultural que tiene la comunidad afropalenquera es su principal objetivo. Hacer de la lengua palenquera un canal de comunicación directo entre los adultos, jóvenes y niños pertenecientes a esta etnia se ha convertido en el reto del primer colegio trilingüe en Barranquilla.
Ubicado en el barrio Nueva Colombia, este colegio es el escenario en el que se desarrollan diferentes estrategias enfocadas en el aprendizaje de la lengua palenquera, así como el inglés y el español, desde la básica primaria.
Un grupo de docentes apasionados por fortalecer la identidad afro trabajan incansablemente para que las nuevas generaciones dejen a un lado los estigmas y se sientan orgullosos de sus raíces.
El proceso no ha sido fácil. Durante más de 30 años, cuando este colegio se llamaba Benkos Biohó –en homenaje al libertador de los afro durante la esclavitud–, se ha venido trabajando en los estudiantes el empoderamiento sobre sus arraigos culturales y la importancia que estos tienen dentro de la sociedad.
'Al comienzo los jóvenes no se sentían identificados, pero ya se identifican, les gusta, quieren aprenderla porque se dieron cuenta que por medio de la lengua palenquera se pueden comunicar con sus compañeros y las otras personas no saben de qué están hablando', explica Luis Felipe Salgado, docente de inglés y lengua palenquera.
En este colegio hay niños mestizos, indígenas y palenqueros. Todos comparten el mismo espacio y saberes, promoviendo la igualdad y minimizando los actos discriminatorios dentro de esta población.