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Abandonados. Así manifestaron sentirse los comerciantes del mercado de Granos en Barranquilla tras las afectaciones que han sufrido por cuenta de la ola invernal en la ciudad.

Las fuertes lluvias y el desbordamiento del caño de la Auyama causaron la inundación de la zona y una 'permanente contaminación' debido al estancamiento de estas aguas.

Los vendedores de esta zona del Centro precisaron que esta problemática es reiterativa cada vez que llega el invierno y cuestionaron que desde el Distrito no se tenga una solución inmediata ante esta situación.

Expresaron que han tenido 'altas' pérdidas económicas y afecciones de salud por la arremetida del agua en las áreas donde permanecen sus negocios.