El despertar de los habitantes del barrio Las Flores, en el norte de Barranquilla, la madrugada de este miércoles se dio por el fuerte sonido de la explosión de uno de los tanques de almacenamiento de combustible de la empresa Bravo Petroleum.
A eso de las 4:30 de la mañana, las sirenas de las máquinas del Cuerpo de Bomberos de Barranquilla y las ambulancias empezaban a tomar mayor fuerza en la zona. A su vez, la nube espesa de humo se esparcía.
Tras vivir más de 50 años en este barrio, Yenis Alicia Martínez Barranco se imaginó que, dicho estruendo, había sido generado por el movimiento de los tanques de las plantas industriales vecinas, sin embargo, al asomarse por la ventana y observar todo tranquilo, volvió a dormirse.