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El preocupante aumento de las inconformidades de los afiliados contra las EPS llamó la atención de la Superintendencia Nacional de Salud, que hizo un llamado de atención a los actores responsables en el departamento del Magdalena.

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Según un reporte de Supersalud, se han radicado un total de 28.160 reclamos en salud en este departamento del Magdalena, y el 33.6% de esas quejas corresponden a súplicas de vida, es decir, situaciones en que había un riesgo inminente para la vida de los pacientes y se requería la intervención inmediata de la Supersalud ante las EPS.

El superintendente Nacional de Salud, Ulahí Beltrán López, realizó una visita a las instalación de la mesa de intervención territorial para dar a conocer el diagnóstico de la situación y formular un plan de acción que permita mejorar el servicio para los usuarios.

'Tenemos un acelerado y progresivo aumento de quejas. Hay cuatro aseguradoras que superan por lejos un alto promedio en tasa de insatisfacciones y reclamos. Algunas de estas son Famisanar, Sanitas, Sura y Nueva EPS', señaló el superintendente Beltrán López.

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El Superintendente también expresó que espera contar con el compromiso de la administración departamental liderada por el gobernador Carlos Caicedo y la secretaría de Salud, Diana Celedón.

'Cuando llegué a la Superintendencia, el hospital Julio Méndez Barreneche, que estaba intervenido, avanzó de manera significativa. Sin embargo, las dificultades del sistema en temas como el flujo de recursos ante el no pago oportuno de las EPS y una contratación que dista mucho de ser la ideal en el marco tarifario que se ha pactado por parte de las entidades que le compran servicios, han generado circunstancias que deben enfrentarse y ajustarse cuanto antes en el Hospital Julio Méndez Barreneche', aseguró.

Por último, el funcionario culminó mencionando que como ocurre con la gran mayoría de los departamentos, Magdalena también es el reflejo de la gran criticidad que atraviesa el sistema de salud del país.