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El bautizo de la carrera 50, entre calle 45 y Vía 40, como la ‘Avenida de la Paz Palestina’ fue la motivación que tuvo la comunidad palestina para donar un monumento como muestra de agradecimiento a Barranquilla, la ciudad que los ha acogido por decádas con fraternidad.

En la capital del Atlántico, más 30 mil personas de origen palestino han echado raíces con grandes aportes a la ciudad. La industria, el comercio y la gastronomía son algunos de los aspectos que han sido dinamizados por los integrantes de esta colonia, considerada como la más numerosa en el país.

Odette Yidi, vocera de la comunidad colombo-palestina y directora del Instituto Cultura Árabe de Colombia, aseguró a EL HERALDO que el monumento surge de un proceso de co-creación entre la comunidad palestina asentada en la capital del Atlántico y el artista Walter Buelvas.

'En el Concejo se aprobó nombrar una calle como avenida de la Paz palestina. Hay muchas ciudades en el mundo donde hay espacios públicos que reciben el nombre de Palestina', recordó.

Explicó que en este monumento –que recibe el nombre de ‘Solidaridad’– se ven representadas dos manos: una con la bandera palestina y otra con el pabellón nacional. Adicionalmente, una de las manos cuenta con una antorcha que simboliza la libertad y la justicia, mientras que la otra tiene una llave que representa un símbolo de conciencia política y un distintivo cultural para los palestinos.

'En 1948, cuando se produce el primer éxodo masivo con la creación del Estado de Israel y el plan Dalet (ejecutado por las milicias sionistas para desocupar la mayor cantidad de territorio de palestinos), muchos de los palestinos huyen y piensan que van a regresar. Por eso salen de sus casas sin nada, solo con las llaves. Por eso se convierte en un símbolo y una afirmación del derecho al retorno', expuso Yidi.

Explicó, además, que junto a la Alcaldía de Barranquilla se realizó un proceso de revisión para definir la mejor ubicación del monumento. Finalmente fue instalado en el parque El Golf, donde fue develado recientemente durante un acto que contó con la presencia de diplomáticos palestinos y autoridades locales.

'No es el primer monumento que la comunidad árabe, en general, dona a la ciudad. Ha habido otros gestos de agradecimiento y fraternidad entre la comunidad y Barranquilla. Ha sido un proceso reciproco. A nosotros nos han acogido, no es una ciudad donde la discriminación ha sido la norma, sino que –todo lo contrario– se ha dado una integración positiva', recalcó Yidi.