La Contraloría anunció la apertura de una Actuación Especial de Fiscalización al Ministerio de Justicia, a la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (USPEC) y al Inpec con el objetivo de verificar las condiciones y servicios que prestan los establecimientos penitenciarios y carcelarios del país.
Lea también: ¿A qué se deben las suspensiones temporales del servicio de energía?
Entre las prisiones a verificar se encuentran Girón Palogordo, El Bosque de Barranquilla, La Modelo Bogotá, La Paz de Itagüí, CPAMS Valledupar, CPAMS Santa Marta y La Ternera en Cartagena, entre otros.
Asimismo, el funcionamiento y condiciones de las salas de audiencia de los Centros Transitorios de Reclusión en el nivel central serán examinadas a través de una Actuación Especial de Fiscalización al Ministerio de Justicia, la Defensoría del Pueblo, el Consejo Superior de la Judicatura y la Fiscalía que adelantará la Contraloría Delegada para el Sector Justicia.
Lea también: Con reconocimiento de placas fortalecen controles viales en Soledad
“Al finalizar esta actuación, se emitirá un de concepto sobre la forma cómo se ejecuta la habilitación e implementación de las salas de audiencias en estos centros, que hacen parte fundamental del debido proceso en materia penal”, indicó la Contraloría mediante un comunicado.
A la par de estos anuncios, el ente de control ya ha llevado a cabo visitas a centros de reclusión como a la Cárcel de Mujeres El Buen Pastor, en Bogotá, en la que se encontraron y se reportaron a la contralora delegada para el Sector Justicia, Jenny Elizabeth Lindos, “situaciones preocupantes”.
Lea también: Con reconocimiento de placas fortalecen controles viales en Soledad
Entre los hallazgos hay baldosas rotas en el patio que aloja a niños hijos de reclusas, shut de basuras con calificación de inconformidad por parte de la Secretaría Distrital de Salud, el alojamiento de la guardia masculina del Inpec que 'se cae a pedazos y está a punto de colapsar'.
Pero también se encontraron frecuentes filtraciones de agua, lo mismo que goteras, como también taponamiento de tuberías que hacen algunas reclusas y, en el tema de salud, varias privadas de la libertad con enfermedades graves, concluyó la Contraloría.
