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Con los aromas de la Sabana, el río, el mar y el monte, este año será irresistible no antojarse de las preparaciones ancestrales de los Zenú, aborígenes que habitaron el departamento de Sucre y que dejaron un legado gastronómico rico en preparaciones artesanales.

El departamento de Sucre es la región de Colombia a destacar en Sabor Barranquilla.

Hablar de Sucre es saborearse con más de 20 diferentes formas de preparar el bocachico, 13 bollos de maíz, 8 mazamorras, 7 arepas, para solo anticipar la muestra de la región al evento. Riqueza es la palabra que mejor describe la región de los Zenú.

María Emilia Losada, una chef con raíces sucreñas explica que los pasteles son un legado que dejaron los aborígenes, ya que aprendieron a cocinar en hojas de bijao. En la actualidad los pasteles más apetecidos de toda la población los venden a orillas de la carretera entre Sincelejo y Corozal. Son económicos, están al alcance de todos los públicos y se han convertido en ícono de la gastronomía de esta región.

Otra delicia sucreña, que resalta María Emilia es la galleta Chepacorina, su nombre se da porque la persona que las creó era una panadera famosa llamada Josefina Corina. Su lema era: 'para amasar el pan hay que hacerlo con alegría'.

Más que su exquisito sabor fue lo que ella puso de su corazón para la elaboración de este manjar.

Las bolitas de dulce de leche y las galletas chepacorinas son los postres típicos de la región sucreña.

Todos estos productos son típicos de la carretera. A ellos -agrega Losada- se suma el diabolin, que antes solo se conseguía en Corozal, 'pero ahora lo encontramos en todas las esquinas de la Costa Caribe. Es elaborado con yuca y queso'.

María Emilia Losada recuerda que cuando niña recibía de merienda por las tardes diabolines con refresco de cola con leche y ella los saboreaba gustosamente. 'Estos manjares marcaron mi infancia y mi vida'.

Otra tradición gastronómica es el ajonjolí, considerado la mantequilla de los sucreños. 'La bolita se hace con ajonjolí tostado molido y con la misma grasa se va amasando hasta dejarlo como una deliciosa crema, que luego se unta en el bollo que acompaña a un delicioso chocolate en el desayuno'.

Los diabolines se encuentran en todas las esquinas de la Costa Caribe.

En materia de postres, María Emilia destaca el dulce de leche, que antes vendían en bolitas en las tiendas y que producían una agradable sensación al paladar.

Y a la hora de refrescarse afirma que hay dos frutas que son las más refrescantes de la región: el corozo y el tamarindo.

Como estas hay muchas otras recetas sucreñas que serán presentadas en el marco de Sabor Barranquilla que se celebra hasta el 23 de agosto.

La chef María Emilia Losada se siente agradecida de que sus bases como cocinera las debe a la sabana de este departamento.