El accidente de la chiva turística o rumbera en la vía a Taganga ocurrido el domingo con saldo de 30 heridos, encendió las alertas por la violación a las normas vigentes en materia de circulación de esta clase de vehículos.
Al automotor le estaba prohibido transitar por esa zona turística, iba con sobrecupo (capacidad de 22 y llevaba 30) y supuestamente presentaba fallas mecánicas.
El director del tránsito del Distrito, Víctor Arismendi Arias, manifestó que a raíz de este suceso, que 'por la gracia de Dios no dejó víctimas fatales', se iniciaron operativos logrando la inmovilización de cinco carros, con lo cual suman 27 en el año.
Señaló que se inició un proceso de revisión técnico mecánica a fin de poner a buen recaudo algunos de estos vehículos no aptos para circular.
Otro hecho irregular es que el número de decibeles en los equipos de sonidos internos rompen los estándares para ruido ambiental. Además, hay excesivo consumo de licor.
MEDIDAS DRÁSTICAS
El alcalde Carlos Caicedo lamentó lo sucedido y recordó que cuando tomó la decisión de prohibir el tránsito de estas chivas por Taganga, algunas partes de El Rodadero y el Centro Histórico, al igual que otras restricciones, fue criticado por atentar contra la subsistencia de un sector social.
'Es importante que los decretos que la administración expida tengan un seguimiento de la fuerza pública porque esto estaba más que previsto por el estado vetusto de los carros', anotó el mandatario de los samarios.
'Hay que ser drástico y los dueños de las empresas deben ser sancionados', recalcó el gobernante.
EL DECRETO
En marzo la Alcaldía de Santa Marta por intermedio de la Unidad Técnica para la Regulación del Tránsito y Transporte expidió el decreto 137, por medio del cual adoptó medidas restrictivas temporales en materia de tránsito, las cuales protocolizó de manera indefinida en otro acto administrativo de junio.
La chiva turística se volcó en momentos en que se dirigía al balneario por el sector del Mirador. Una falla mecánica habría sido la causa del suceso que dejó 30 personas heridas, todas turistas de diferentes partes del interior del país. Los lesionados están fuera de peligro.