Emocionada, Gladys Cajal alzó sus brazos y exclamó: '¡Por fin, Señor!'. No era para menos, el sueño de cocinar con gas natural se le hizo realidad tras más de medio siglo de espera. El servicio que tanto ilusionaba para, Apure, municipio de Plato, su tierra natal, había llegado.
En la cocina de su casa y delante de la gobernadora del Magdalena, Rosa Cotes, del gerente de Gases del Caribe, Ciro Monsalvo y del gerente de proyectos departamental, Fabio Manjarrés, encendió en su estufa la que denominó, 'la llama de la felicidad'. Un tinto fue lo primero que preparó para los oferentes. Seguidamente vino la cocción de alimentos.
En total 1800 personas pasaron de la leña al gas natural domiciliario.
La gobernadora dijo que con este proyecto terminaron las costosas y peligrosas pipetas así como las salidas a cortar leña para cocinar. 'Se benefician los usuarios y evitamos daños a la naturaleza'.
En Loma del Bálsamo, jurisdicción de Algarrobo, también fue inaugurado el servicio para 2.500 personas. Allí se anunció que pronto otra zona del territorio, la Estación Lleras, recibirá el servicio.
'Quiero comprometerme con ustedes para que le apuesten a esta comunidad y así tengamos equidad, porque Estación Lleras también es Magdalena. Me siento feliz por mi comunidad', afirmó Maribel Andrade, alcaldesa de Algarrobo.
