Santa Marta. Una mortandad de peces en la Ciénaga de Zapayán, centro del Magdalena, tiene en emergencia a seis poblaciones del municipio del mismo nombre, al igual que de Concordia y Pedraza. La calamidad se registró luego que el miércoles por la tarde cayó un aguacero.
La muerte masiva de los peces fue registrada la misma noche del miércoles por los mismos habitantes, quienes de inmediato dieron aviso a las autoridades civiles.
Entre las especies afectadas están la arenca, la mojarra amarilla, la corvina, la tilapia negra y el bocachico, todas muy pequeñas, en su primera etapa de nacimiento.
'Lo que hemos establecido es que las primeras lluvias tienen un alto contenido de ácido dentro de sus componentes, lo que al parecer provocó algún tipo de intoxicación sobre los peces', detalló el alcalde de Zapayán, Manuel De La Cruz.
Sin embargo Corpamag sostuvo que debido al aguacero 'se produjo un cambio fuerte de temperatura, lo cual alteró el PH y se agotó el oxígeno'.
La preocupación del mandatario municipal radica también en que los peces muertos están muy cerca de la bocatoma del acueducto del corregimiento Piedras Pintadas. 'Tememos que se desate un problema de salud pública porque esa agua se coge para el consumo', anotó.
ANGUSTIAS
En Piedras Pintadas, jurisdicción de Zapayán y en donde con mayor fuerza se registra la emergencia, los habitantes están atravesando quizás la dificultad más grande de todos los tiempos. Leonel Padilla, uno de los afectados, manifestó que 'estamos con las manos cruzadas'. 'No tenemos con qué alimentarnos; nuestra principal fuente de ingresos y subsistencia se nos contaminó', comentó.
Indicó que prácticamente toda la población se dedica a las labores de pesca y que es por ello que la emergencia afecta a todos. Andrés Sánchez es el tendero del pueblo y asegura que el negocio en las últimas 48 horas ha venido en declive debido a que él es quien provee de insumos a los pescadores.
'Con esta situación nadie se escapa a la debacle… sin excepción todos nos vemos perjudicados', afirmó.
La emergencia ambiental por la mortandad de peces en la Ciénaga de Zapayán, afecta, además de Piedras Pintadas, a Piedras de Moler (cabecera municipal, de Zapayán) y al corregimiento de Capucho. Igualmente a las localidades de Bomba y Heredia, en el municipio de Pedraza y a Bálsamo, en Concordia.
Ante la calamidad, la Corporación Autónoma Regional del Magdalena, envió ayer una comisión para que analice técnica y científicamente la situación. Hoy, el director de la entidad, Carlos Francisco Diazgranados y el subgerente, Alfredo Martínez se unirán al grupo.
DECRETAR CALAMIDAD
El Gobierno departamental estudia la posibilidad de decretar la calamidad ambiental y económica en todo el ente territorial, a fin de lograr los recursos necesarios para aliviar la pena que embarga a los habitantes por el Fenómeno de El Niño.
'Frente a las adversidades casi simultáneas, pues la urgencia que antecedió fue en la Ciénaga de Cerro de San Antonio, seguimos estudiante la posibilidad de hacer la declaratoria oficialmente', dijo la gobernadora Rosa Cotes.
Agregó que 'pese a estas adversidades planteadas por la naturaleza, esta administración ha estado al lado de los afectados'.Esta es la tercera emergencia ambiental en 15 días en el Magdalena. Las dos primeras fueron en Concordia y luego, Trojas de Cataca.