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Pescadores de la zona de Dibulla, en La Guajira, reportaron que la avioneta de fumigación extraviada desde el sábado tras haber alzado vuelo desde la pista Pelechúa, en la península, con destino a Buritaca, en el Magdalena, cayó al mar.

La información la entregó oficialmente el director de la Defensa Civil en el Magdalena, mayor, Eduardo Vélez Soto, quien comunicó que ante la noticia se intensificó la búsqueda en esa zona. 'La aeronave se sumergió', dijo.

El bimotor, Cessna HK714, perteneciente a la empresa ASA (Aerosanidad Agrícola), piloteado por Carlos Alberto Villar, decoló de la pista Shangrila, en el sector de Pelechúa (La Guajira) con destino a la pista La Diva, en la región de Buritaca, (Magdalena), en cumplimiento de una programación de fumigación en fincas bananeras.

El vuelo entre los puntos referenciados tiene una duración de 30 minutos, por lo que transcurrida una hora del mismo, y sin que se tuvieran noticias del porqué no llegó a su destino, se dio aviso a las autoridades competentes, caso concreto Aerocivil, Fuerza Aérea Colombiana, Armada Nacional, Policía Nacional y Defensa Civil.

Versión de campesinos

En medio de las tareas que se llevan a cabo para dar con el paradero de la avioneta y su piloto, las autoridades encargadas de esta tarea tomaron en un comienzo como base de la investigación el testimonio de campesinos de la región adyacente al Cerro Los Muchachitos, en los límites del Magdalena con La Guajira.

De acuerdo con lo manifestado por labriegos de una finca del sector, bien temprano, cuando estaban dentro de sus casas, escucharon un ruido de motor de avioneta que 'no era normal'.

Sin embargo, dijeron no haber visto sobrevolar la aeronave y que solo el extraño sonido de su motor fue lo que los alertó. Horas después se conoció la versión de los pescadores de Dibulla.

No hubo alerta

Mientras el misterio rondaba la desaparición de la avioneta de color blanco con amarillo, de franjas y emblemas negros, la administradora de la empresa ASA, Claudia Rueda, no se explica por qué, si había una emergencia el piloto Carlos Alberto Villar no informó absolutamente nada.

'Tenía radio, teléfono, también GPS, pero no se reportó', dijo la ejecutiva de la empresa de aviación.

Indicó que la aeronave se dio por desaparecida a las 7:30 de la mañana, pues se pensó que quizás quien la timoneaba hubiere podido tomar otra ruta alternativa más larga entre las pistas de Pelechúa y La Diva.

De Carlos Villar comentó que es un piloto veterano, de 56 años de edad y 40 años de experiencia en el oficio.

Al cierre de esta edición, autoridades seguían buscando al piloto oriundo de San Gil, Santander, quien frecuentemente volaba por esta ruta.