El conductor y el líder evangélico que permanecían en la cárcel vinculados a la tragedia de Fundación del 18 de mayo del 2014 en la que murieron 33 niños y un adulto calcinados tras incendiarse el bus en que se movilizaban, quedaron en libertad. Un juez de garantías así lo determinó en las últimas horas.
Jaime Gutiérrez Ospino, el chofer y Manuel Salvador Ibarra, el pastor de la Iglesia Pentescostal Unida de Colombia, fueron dejados en libertad por haber transcurrido más de un año de estar en la cárcel sin que se cumpliera el juicio, pero además, la Fiscalía no solicitó la prorroga de la medida de aseguramiento.
El abogado Carlos Mauricio Ramírez, de la firma `World Legal Corporation´, solicitó por escrito e l 15 de agosto pasado ante Juez de Función de Garantías de Ciénaga, se revocara la medida de aseguramiento contra ellos, amparados en la Ley 1786 del 2016 que señala: 'El término de las medidas de aseguramiento privativas de la libertad no podrá exceder de un año'.
Ibarra y Gutiérrez llevan tres años dentro de la cárcel Modelo de Barranquilla. Su detención se produjo el 19 de mayo de 2014, al día siguiente de la tragedia ocurrida en el barrio Altamira, minutos después de que el vehículo en que se miovilizaban los niños partiera de una iglesia evangélica donde habían cumplido con una jornada lúdica.
Como es de recordar, la detención de los implicados se cumplió el 19 de mayo de 2014, un día después de la tragedia y fueron llevados ante el Juez Sexto Penal con Función de Control de Garantías de Santa Marta,
